Don Juan Carlos habl¨® de 'di¨¢logo y distensi¨®n' durante la visita a Berl¨ªn

ENVIADO ESPECIAL, Los Reyes don Juan Carlos y do?a Sof¨ªa se asomaron ayer al muro de Berl¨ªn desde uno de los balcones latereles del Reiclistag, el antiguo Parlamento alem¨¢n, situado a no m¨¢s de 20 metros de la muralla que sigue obsesionando la vida de los dos Estados alemanes. Durante la recepci¨®n que se les ofreci¨® en el Ayuntamiento de la antigua capital alemana, don Juan Carlos habl¨® de la necesidad de superar, por el di¨¢logo y la distensi¨®n, la separaci¨®n entre los dos mundos que confluyen en Berl¨ªn.

Los Reyes iban acompa?ados por el alcalde de Berl¨ªn, Eberkard Diepgen, y por el presidente del Parlamento federal alem¨¢n, doctor Jenninger. Don Juan Carlos se interes¨® vivamente por la situaci¨®n de la zona e hizo varias preguntas relacionadas con los l¨ªmites y las ¨¢reas de seguridad en tomo al muro.No trascendi¨® ning¨²n comentario especial de don Juan Carlos. Tampoco hubo, como ya es habitual desde hace alg¨²n tiempo, ning¨²n tipo de protesta diplom¨¢tica por parte de la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana. S¨®lo el ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, a preguntas de los informadores, dijo que la impresi¨®n que causaba la contemplaci¨®n del muro era de profundo pesar y evoc¨® la siguiente frase de Goethe: "Las tonter¨ªas se dicen o se escriben, pero no se construyen".

Fuentes diplom¨¢ticas espa?olas pusieron de relieve que la visita de los Reyes al muro de Berl¨ªn se ha hecho por sugerencia expresa de las autoridades de la Rep¨²blica Federal Alemana, que mostraron insistente inter¨¦s sobre este punto en los proleg¨®menos del viaje.

La jornada de los Reyes comenz¨® sobre las ocho y media de la ma?ana cuando salieron del aeropuerto de Bonn para dirigirse al de Hannover, con objeto de visitar la factor¨ªa que la empresa Volkswagen tiene en Wolfsburg. Don Juan Carlos y do?a Sof¨ªa llegaron en helic¨®ptero a la f¨¢brica automovil¨ªstica que acaba de adquirir la mayor¨ªa de las acciones de la empresa espa?ola Seat.

All¨ª se encontraban el ministro de Industria, Joan Maj¨®, el presidente del INI, Juan Carlos Croissier y otras autoridades del Ministerio de Industria espa?ol. Los Reyes fueron recibidos por el presidente de la Volkswagen, Carl H. Hahn, a los acordes del pasodoble Que viva Espa?a. Los Reyes hicieron una breve visita a la factor¨ªa y m¨¢s tarde mantuvieron un encuentro con 17 espa?oles (16 hombres y una mujer) que trabajan en la factor¨ªa Volkswagen.

Al mediod¨ªa don Juan Carlos y do?a Sof¨ªa llegaron a Berl¨ªn y en el ayuntamiento recibieron la bienvenida del alcalde de la ciudad, Diepgen. El acto, al que asisti¨® una nutrida representaci¨®n de los aproximadamente 1.500 espa?oles que trabajan en esta ciudad, cobr¨® calor por encima de lo protocolario.

Responsabilidad de todos

Los Reyes fueron recibidos con una ovaci¨®n sostenida y prolongada durante varios minutos. Don Juan Carlos dijo en su intervenci¨®n que "por Berl¨ªn pasa la l¨ªnea secante que separa dos mundos y es responsabilidad de todos procurar superarla mediante el di¨¢logo y la distensi¨®n, hasta conseguir su completa desaparici¨®n".

Antes, hab¨ªa hecho referencia a Berl¨ªn como "s¨ªmbolo sin par de la voluntad de sobrevivir, a¨²n bajo circunstancias dram¨¢ticas".

Tras un almuerzo ofrecido por el alcalde de Berl¨ªn en el palacio de Charlotteriburg, los Reyes emprendieron. vuelo a M¨²nich, en cuyo aeropuerto les esperaba el ministro-presidente del Estado de Baviera, Franz Josef Strauss, que les dispens¨® un recibimiento con gran ceremonial.

La jornada concluy¨® con una cena oficial en el palacio presidencial de M¨²nich, en la que Strauss dijo: "El complemento l¨®gico de la adhesi¨®n de Espa?a a la Comunidad Europea es, a mi juicio, su colaboraci¨®n en la OTAN".