'Billo' Frometa
Medio siglo de ritmo 'merengue'
Billo Frometa, que en realidad se llama Luis Mar¨ªa Frometa Pereyra, es uno de los m¨²sicos hist¨®ricos de Am¨¦rica. A sus 70 a?os confiesa que siente las mismas vibraciones que al principio cuando dirige a la Billo's Caracas Boys, la orquesta que fund¨® hace casi medio siglo en Venezuela. Su sonido, el merengue, ha hecho bailar a diferentes generaciones, que siguen movi¨¦ndose al ritmo de esta veintena de instrumentistas y voces, entre las que figur¨® Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez El Puma. La Billo's ha cruzado el Atl¨¢ntico para hacer su entrada en Europa a trav¨¦s de Canarias, de donde procede por v¨ªa materna su creador.
"La vida es hermosa. Vivir es algo maravilloso. Yo he vivido tanto y he tenido tantas satisfacciones que me parece estar viviendo mi futuro. Mi arco iris ha ido perdiendo colores, porque ya he pasado por debajo de ¨¦l. Y eso me ha hecho pensar que no hab¨ªa emociones nuevas. Pero el color que ha dado a mi vida mi presencia aqu¨ª, en Tenerife, es indefinible y no existe arco iris que lo posea".Para Billo Frometa, que nunca se explic¨® el verdadero origen de este apodo presuntamente canario, el hecho de haber sido contratado para actuar cinco noches en la plaza de toros de la capital de la isla y hacer recitales en otros municipios ha significado convertir en realidad el sue?o de su vida.
La madre del veterano compositor, Olympia Pereyra, y su abuelo, el viejo Severo, nacieron en Tenerife. En La Laguna, localidad materna, el famoso m¨²sico se sinti¨® como un Pr¨ªncipe negro, seg¨²n se autotitula una de sus ¨²ltimas canciones, dedicada al lugar.
Lleg¨® a Caracas a los 22 a?os, porque los estudiantes de su pa¨ªs, la Rep¨²blica Dominicana, sufr¨ªan persecuci¨®n pol¨ªtica. Se preparaba para ser m¨¦dico ("hubiera sido un buen galeno, porque tengo una letra horrorosa"), pero el gusanillo de la m¨²sica le llev¨® a emigrar con un contrato para tres meses y un saxof¨®n robado al sastre al que ense?aba m¨²sica por las tardes en Santo Domingo. Su primera banda estaba compuesta por otros siete universitarios y cinco profesionales. La estancia en Venezuela se prolong¨® hasta hoy. "Caracas me ense?¨® a tocar y yo la ense?¨¦ a bailar".
Aquel estudiante que daba clases de guitarra, pon¨ªa inyecciones y hac¨ªa arreglos para conjuntos musicales es hoy el padre de todas las orquestas del pa¨ªs y uno de los m¨¢ximos exponentes del tradicional estilo merengue del continente americano. Entre los a?os 1962 y 1965 cont¨® entre sus vocalistas con Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez, El Puma, al que despu¨¦s apadrin¨® como artista individual, en su doble faceta de actor y cantante.
Billo no ha querido mojarse en los nuevos ritmos que han ido apareciendo en estas cinco ¨²ltimas d¨¦cadas; s¨®lo se ha permitido hacer mezclas con la m¨²sica colombiana, que tan bien conoce.
Sus canciones pueden hablar de hechos cotidianos, como el ¨²ltimo cochero de Caracas o el canario Isidoro, o emborrachar de baile a las parejas, como en Abusadora o Pl¨¢tano maduro.
En Santa Cruz de Tenerife, decenas de miles de personas danzaron con la Billo's en la plaza de Espa?a hasta ver amanecer. Y en la plaza de toros la orquesta tuvo que salir tocando y cantando a la calle para despedir a un p¨²blico que se negaba a abandonar el coso.
En Tenerife le han rendido varios homenajes y ¨¦l se ha fotografiado, junto con sus m¨²sicos, en el Teide para la portada de un nuevo disco que prepara sobre esta gira.
Medio siglo ha tardado en llegar a Europa a trav¨¦s de este puente insular con Am¨¦rica. Pronto le ver¨¢n en la Pen¨ªnsula.
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