En castellano
Quine ha sido definido repetidamente como uno de los fil¨®sofos m¨¢s importantes de la actualidad. As¨ª, Alfred J. Ayer afirma de ¨¦l: "Desde la muerte de Wittgenstein y el desplazamiento de los intereses principales de Russel de la filosof¨ªa a la pol¨ªtica, el fil¨®sofo vivo que ha tenido mayor influencia sobre sus colegas, al menos en el mundo anglosaj¨®n, es el norteamericano Willard Van Orman Quine".Esta valoraci¨®n, que no es la ¨²nica, no se le ha subido a la cabeza. Quine es un hombre apacible y afable que, en el congreso celebrado durante esta semana en Granada sobre su obra, ha asistido a las sesiones y ha intervenido en todas ellas puntualizando, matizando o discrepando, seg¨²n los casos, en un castellano lento pero preciso.
La primera ponencia la efectu¨® Tom¨¢s Calvo, catedr¨¢tico de la universidad granadina. En su charla analiz¨® la utilizaci¨®n del t¨¦rmino "experiencia" en la obra de Quine, anotando que aparece con mucha m¨¢s frecuencia en sus primeros escritos que en los ¨²ltimos y que el decaimiento del uso de la expresi¨®n coincide con un cambio del contenido del t¨¦rmino.
Objeciones
Jes¨²s Moster¨ªn, catedr¨¢tico de L¨®gica en la universidad de Barcelona, expuso algunas objeciones a la distinci¨®n efectuada por Quine entre l¨®gica y teor¨ªa de conjuntos; Alfonso Garc¨ªa Su¨¢rez, catedr¨¢tico de la universidad de Oviedo defendi¨® la tesis, seg¨²n la cual, contra la opini¨®n de Quine, hay lugar para una filosof¨ªa prirriera; Enrique Villanueva, del Instituto de Investigaciones Filos¨®ficas de la universidad Aut¨®noma ele M¨¦xico analiz¨® algunas de las objeciones que se le han hecho a Quine, en el sentido de que sus aflirmaciones abren la puerta al escepticismo; Daniel Quesada, de la universidad de Barcelona, analiz¨® la posibilidad de una psicolog¨ªa intencional.
Quine niega tal posibilidad y elabora, en contraposici¨®n, una psicolog¨ªa totalmente conductista, que se atiene a la conducta observable y que le lleva incluso a cuestionar la noci¨®n de sIgnificado para las oraciones, su posible traducci¨®n incluso a la misma lengua, trat¨¢ndose de hablantes diferentes -tesis posteriormente suavizada-, y, por consiguiente, el dogma positivista seg¨²n el cual hay dos tipos de proposiciones: las sint¨¦ticas, verdaderas o falsas en funci¨®n de su correspondencia con los hechos, y anal¨ªticas, que lo son s¨®lo en funci¨®n del significado de los signos que expresa.
Seg¨²n Quine, esto s¨®lo es cierto si existe la sinonimia, lo cual no es el caso, ya quepara que dos palabras fueran sin¨®nimas deber¨ªa cumplir igual funci¨®n estimuladora y esto no se produce; Juan Jos¨¦ Acero, de la universidad granadina, analiz¨® un caso del tratamierito de pronombres por Quine, mostrando lo que consideraba una insuficiencia y proponiendo un sistema alternativo.
Otros asistentes al congreso fueron Andres Rivadulla y Manuel Garrido, de la universidad de Madrid; Ulises Moulines, de la universidad de Bielefeld y Juan Carlos Le¨®n, de la de Murcia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.