Lluch estima que el fiscal antidroga descuid¨® los aspectos jur¨ªdicos del cargo para asumir competencias ajenas

El ministro de Sanidad y Consumo, Ernest Lluch, afirm¨® ayer en el Senado que el fiscal antidroga, Jos¨¦ Jim¨¦nez Villarejo, relevado del cargo a petici¨®n propia, hab¨ªa descuidado. los aspectos estrictamente criminol¨®gicos y penales del problema de la droga y hab¨ªa realizado excesivas declaraciones p¨²blicas. Jim¨¦nez Villarejo se mostr¨® sorprendido por las manifestaciones del ministro y asegur¨® que una de las competencias iniciales asignadas a su cargo era la coordinaci¨®n de las investigaciones policiales sobre el tr¨¢fico de droga y que posteriormente se cambi¨® de criterio, raz¨®n por la que ha pedido ser relevado.

El ministro insinu¨® claramente que el fiscal hab¨ªa hecho dejaci¨®n de las funciones m¨¢s espec¨ªficas de su cargo para ocuparse de otras funciones que no eran competencia suya. Tales declaraciones fueron efectuadas durante su comparecencia ante la comisi¨®n de Sanidad del Senado para informar sobre la aplicaci¨®n del Plan Nacional sobre Drogas. El ministro anunci¨® que esta semana ser¨¢ nombrado el sucesor entre los fiscales del Tribunal Supremo.Jim¨¦nez Villarejo pidi¨® en noviembre pasado al fiscal general del Estado ser relevado del cargo, petici¨®n, que le fue concedida la semana pasada, y aleg¨® merma de competencias y falta de colaboraci¨®n por parte de las Fuerzas de Seguridad del Estado. El fiscal hab¨ªa declarado en diversas ocasiones, que no podr¨ªa cumplir con eficacia la misi¨®n que se le hab¨ªa encomendado si no se le conced¨ªa el mando directo y efectivo sobre las Fuerzas de Seguridad del Estado.

Ernest Lluch afirm¨® que la coordinaci¨®n de las distintas fuerzas policiales no es una competencia del fiscal antidroga sino del delegado del Gobierno para el plan, Miquel Solans, que tiene rango de subsecretario de Estado. "El fiscal especial debe ocuparse fundamentalmente de los aspectos criminol¨®gicos y penales del problema y su acci¨®n debe estar centrada en la relaci¨®n con los fiscales y en el an¨¢lisis de los aspectos jur¨ªdico penales, en los que. hay mucho por hacer todav¨ªa. Cuando Jim¨¦nez Villarejo declaraba que en los pobres resultados de su labor hab¨ªa una cuota personal, seguramente es cierto y ser¨ªa esta precisamente".

Trabajos por hacer

El ministro eludi¨® una respuesta clara sobre si se hab¨ªa producido o no falta de colaboraci¨®n con el fiscal especial por parte de las fuerzas policiales, aunque se?al¨® que ha habido un importante aumento en el n¨²mero de decomisos y que ello se debe a ha existido una mayor cooperaci¨®n policial. "En las diversas entrevistas que he mantenido con el fiscal, jam¨¢s me ha planteado esta problem¨¢tica", dijo. "Por el contrario, yo le he planteado mi preocupacion por los aspectos criminol¨®gicos del plan, donde creo que se ha trabajado poco, y le he encargado incluso algunos trabajos muy concretos que hasta la fecha no tengo conocimiento de que se hayan realizado".En su comparecencia ante los senadores, el ministro afirm¨® que hab¨ªa una divergencia fundamental entre ¨¦l y Jim¨¦nez Villarejo: "En cargos corno ¨¦se hay que hacer menos declaraciones y menos comparecencias p¨²blicas, y yo se lo hab¨ªa indicado. En algunos pa¨ªses, el nombramiento de un cargo tan deficado se realiza oficialmente sin mencionar el nombre de la persona que lo ocupa, porque es fundamental la discreci¨®n. Este es mi criterio y la prueba, es que el delegado del plan no hace declaraciones, y no por su voluntad, aunque tambi¨¦n est¨¦ de acuerdo, claro, porque es contraproducente para los objetivos del plan".

"No s¨¦ exactamente a qu¨¦ s¨¦ refiere el ministro de Sanidad al hablar de los aspectos criminol¨®gicos y penales del problema que, seg¨²n dice, he descuidado, pero sus sorprendentes manifestaciones est¨¢n en contradicci¨®n con los eleogios que hizo el fiscal general del Estado a la gesti¨®n del fiscal especial en un momento tan solemne y significativo como la, presentaci¨®n de la memoria de la Fiscal¨ªa General del Estado al Gobierno de la naci¨®n en setiembre de l985", dijo ayer Jos¨¦ Jim¨¦nez Villarejo.

Con respecto a las declaraciones de Ernest Lluch referentes a que la coordinaci¨®n de las fuerzas de seguridad del Estado no eran competencia de Jim¨¦nez Villarejo, sino del delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, el hasta ahora fiscal especial anfidroga dijo: "En el acuerdo por el que se, me design¨® se me atribu¨ªa la coordinaci¨®n de las actividades de investigaci¨®n del tr¨¢fico ilegal de drogas, y a nadie se le oculta que investigar esta crimina lidad es competencia de la polic¨ªa Ello significa que con posterioridad se cambi¨® de criterio, y precisamente ese cambio fue una de las razones que me llevaron a solicitar el relevo". En relaci¨®n con lo encargos de trabajos concretos que Ernest Lluch, afirma haber hecho a Jos¨¦ Jim¨¦nez Villarejo, ¨¦ste dijo: "Jam¨¢s recib¨ª ni hubiera aceptado ¨®rdenes, encargos o directrices del ministro de Sanidad y Consumo, sino exclusivamente del fiscal general del Estado. Al ministro Lluch tan s¨®lo le he visto dos veces, y una de ellas en presencia del titular de Justicia, Fernando Ledesma".

"He de decir, adem¨¢s, que, por supuesto, he realizado las declaraciones p¨²blicas que he considerado convenientes, y me he conducido siempre con la mayor discreci¨®n, en cuya pauta voy a seguir manteni¨¦ndome", afirm¨® Jim¨¦nez Villarejo. "Si en algunos pa¨ªses el nombramiento de un cargo tan delicado se realiza sin mencionar el nombre de la persona que lo ocupa, debo recordar que el d¨ªa de mi designaci¨®n, cuando acud¨ª a la Fiscal¨ªa General del Estado para "recibir oficialmente el nombramiento, me encontr¨¦ con que estaban all¨ª todos los medios de comunicaci¨®n, televisi¨®n incluida, y no fui precisamente yo quien los llam¨®".

En la pol¨¦mica sobre quien debe coordinar las fuerzas policiales subyace, seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, la cuesti¨®n de c¨®mo se articula en Espa?a la polic¨ªa judicial y la relaci¨®n de la administraci¨®n de Justicia con los cuerpos de la Guardia Civil y de la Polic¨ªa Nacional. Por otra parte, fuentes policiales han indicado a EL PA?S que existe un gran malestar entre las fuerzas de seguridad por la actuaci¨®n judicial. Seg¨²n estas fuentes, han sido confeccionados diversos informes donde se relaciona un considerable n¨²mero de casos en que importantes traficantes han obtenido la libertad condicional con fianzas m¨ªnimas.