Washington conf¨ªa en que Gorbachov no suspender¨¢ la 'cumbre' con Reagan
Las reiteradas se?ales que est¨¢ enviando el l¨ªder sovi¨¦tico Mijail Gorbachov de que viajar¨¢ este a?o a Estados Unidos para reunirse con el presidente norteamericano, Ronald Reagan, y la decisi¨®n de Europa de seguir estrechando el cerco al r¨¦gimen libio de Muammar el Gaddafi con nuevas sanciones, fueron recibidas ayer con satisfacci¨®n en Washington, una semana despu¨¦s de que Estados Unidos atacara Libia, provocando tensiones en la OTAN y en las relaciones con la URSS.Son ¨¦stas las primeras noticias positivas tras unos d¨ªas en los que Washington ha aguantado una oleada internacional de cr¨ªticas, sin precedentes desde la guerra de Vietnam. "Pensamos que la cumbre se celebrar¨¢ este a?o como estaba previsto y estamos dispuestos a discutir una agenda amplia con Mosc¨², incluido el tema del terrorismo", dijo ayer un portavoz de la Casa Blanca.
Despejada de la esperada ret¨®rica, la reacci¨®n de la URSS al bombardeo de Libia ha sido bastante moderada, seg¨²n fuentes de la Administraci¨®n. Los sovi¨¦ticos est¨¢n tratando de retrasar la cumbre, que Reagan hubiera preferido en julio y que probablemente se celebrar¨¢ en noviembre o diciembre, para presionar a EE UU en las cuestiones de control de armamentos, pero en ning¨²n caso quieren suspenderla.
?Un nuevo ataque?
La Administraci¨®n guarda desde hace 72 horas un silencio absoluto sobre nuevas acciones contra Gaddafi si ¨¦ste repite ataques terroristas contra EE UU. La reacci¨®n de la Comunidad Europea, que ayer adopt¨® en Luxemburgo nuevas medidas contra Libia, se presenta como un triunfo de la pol¨ªtica norteamericana que, a trav¨¦s de la acci¨®n militar y bajo la amenaza de un nuevo ataque, est¨¢ consiguiendo que los aliados se decidan a hacerle m¨¢s dificil la vida a Gaddafi. Contin¨²an, sin embargo, las cr¨ªticas a la posici¨®n europea, calificada de pusil¨¢nime por no haber apoyado el ataque. El alcalde de Nueva York, Edward Koch, afirm¨® el domingo que EE UU deber¨ªa castigar a los aliados retirando tropas de Centroeuropa y llev¨¢ndolas al Reino Unido, el ¨²nico pa¨ªs que apoy¨® a Washington la semana pasada. La Embajada espa?ola en Washington recibi¨® la semana pasada, al d¨ªa siguiente de la operaci¨®n militar, decenas de llamadas de norteamericanos indignados por la negativa de Madrid de dejar utilizar el espacio a¨¦reo espa?ol a los bombarderos FB-111.Especialistas de la CIA citados por The Washington Post aseguran, por su parte, que Gaddafi se encuentra sumido en una profunda depresi¨®n tras el bombardeo de su cuartel general, que provoc¨® la muerte de su hija adoptiva e hiri¨® a otros dos de sus hijos, seg¨²n informaciones del espionaje norteamericano. El l¨ªder libio, cuyo derrocamiento, si no su desaparici¨®n fisica, aparece claramente como el objetivo n¨²mero uno de Reagan y de su operaci¨®n militar Ca?¨®n El Dorado, est¨¢ manifestando seg¨²n esas fuentes extravagantes cambios de humor propios de una personalidad man¨ªaco-depresiva.
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