Como serpientes de cascabel

Los personajes de Mankiewicz, bribones, astutos y comediantes sin fin, despu¨¦s de su tr¨¢nsito por Venecia -es decir, despu¨¦s de Mujeres en Venecia-, admirable comedia que este ciclo ha dejado en la cuneta-, se fueron al Oeste. Un espacio limpio y puro donde esa fauna cruel ha de contaminar hasta los cactus. El d¨ªa de los tramposos es el primer westem de Mankiewicz, de 1970, y tambi¨¦n el ¨²ltimo: tras ¨¦l s¨®lo ha realizado La huella, poniendo punto y final a una de las filmograf¨ªas m¨¢s fecundas del cine norteamericano contempor¨¢neo, no por gusto, parece ser, sino por esa dificultad cada vez m¨¢s insondable que padecen las glorias de la vieja guardia por encontrar temas, financiaci¨®n y condiciones adecuadas de continuidad.Kirk Douglas, aqu¨ª, es un c¨ªnico ladr¨®n que, tras un fruct¨ªfero asalto, esconde su bot¨ªn en un nido de serpientes de cascabel. Apresado, es conducido a un penal de Arizona donde deber¨¢ cumplir condena bajo la disciplinada direcci¨®n de un nuevo alca¨ªde que oculta bajo sus barbas el rostro amigable de Henry Fonda. Infinidad de acontecimientos se suceden en el zool¨®gico humano que encarna la penitenciar¨ªa, cuyos reclusos son emblemas de las mayores ambiciones y la m¨¢s grande falta de escr¨²pulos. Al final, c¨®mo no, tocata y fuga, y Kirk Douglas a la b¨²squeda de su tesoro escondido, con golpe de sorpresa por parte de Fonda y su rectitud legal.

Varios placeres proporciona al espectador El d¨ªa de los tramposos. El seguidor de la obra prestigiosa de Joseph L. Mankiewicz hallar¨¢ en el filme todos los elementos caracter¨ªsticos en ¨¦l, bien que adaptados -y enriqueci¨¦ndolos- a los c¨®digos del g¨¦nero: la teatralidad de la vida, el fingimiento y el cinismo, y un gui¨®n urdido con implacable soltura (obra de los expertos David Newman y Robert Benton; de este ¨²ltimo, TVE emiti¨® ayer su segundo largometraje: El gato conoce al asesino).

Otro motivo de placer es el exquisito trabajo de sus int¨¦rpretes, con dos monstruos sagrados en cabeza. Kirk Douglas y Henry Fonda tienen solera, a sus espaldas quedan sendas carreras de mucho m¨¦rito, que han sabido ganarse al p¨²blico de todos los continentes y otorgar calidad a las pel¨ªculas con su presencia ¨²nicamente.

Mankiewicz realiz¨® con El d¨ªa de los tramposos una verdadera obra maestra, l¨²cida, sard¨®nica y divertida, un mosaico pat¨¦tico del ser humano, o de la serpiente de cascabel, que viene a ser lo mismo.

El d¨ªa de lo tramposos se emite hoy, a las 22.10, por TVE-2.