Un nuevo libro de Boff agudiza las diferencias entre el Vaticano y la 'teolog¨ªa de la liberaci¨®n'

El te¨®logo brasile?o Leonardo Boff, al que el Vaticano levant¨® recientemente la prohibici¨®n de expresar p¨²blicamente sus ideas, impuesta por el contenido de su libro Carisma y poder, acaba de editar otra obra, Y la Iglesia se hace pueblo, que suscita fuertes controversias y, seg¨²n los expertos, agudiza las diferencias entre el Vaticano y la teolog¨ªa de la liberaci¨®n.

Carisma y poder, publicado hace cinco a?os, expone las posiciones fundamentales de la teolog¨ªa de la liberaci¨®n, que escandalizaron a los sectores conservadores de la Iglesia cat¨®lica debido a su "opci¨®n preferencial por los pobres" y a su cr¨ªtica de las estructuras jer¨¢rquicas de la Iglesia.El "silencio cauteloso" impuesto a Boff por el papa Juan Pablo II en 1985 fue suspendido por el propio pont¨ªfice a finales; de marzo pasado, un mes antes de la fecha prevista, precisamente en momentos en que aparec¨ªa su nuevo libro, elaborado durante los 11 meses de su exilio verbal.

Discrepancias

Debido a sus enfoques pol¨ªtico-sociol¨®gicos de la fe cristiana y al uso de categor¨ªas marxistas, este libro implica, seg¨²n algunos te¨®logos, que Boff no s¨®lo no se retracta de sus posiciones anteriores, sino que aumenta las discrepancias entre los sectores "conservadores y progresistas" de la Iglesia cat¨®lica.En opini¨®n del padre J. B. Libanio, presidente de la Asociaci¨®n de Te¨®logos de Brasilia frase inicial, que es una cita de Juan Pablo II, constituye una s¨ªntesis de toda la obra: "Hambre de Dios, s¨ª. Hambre de pan, no".

Seg¨²n Libanio, cuyas posiciones coinciden con las de Boff, tal frase resume la reflexi¨®n teol¨®gica sobre el significado de manifestarse contra el hambre (opci¨®n pol¨ªtica) sin extinguir el hambre de Dios por parte de? pueblo (opci¨®n teol¨®gica).

El padre Estevao Betencourt, director de la facultad de Filosof¨ªa Juan Pablo, II, de R¨ªo de Janeiro, expres¨® que el libro Y la Iglesia se hace pueblo incluve tesis sostenidas por Boff antes de las advertencias recibidas de la Santa Sede el 11 de marzo de 198 5 y antes de la imposici¨®n del silencio, el 1 de mayo del mismo a?o.

Seg¨²n Betencourt, uno de los aspectos clave del libro es "la consideraci¨®n de la Iglesia a partir de categor¨ªas sociol¨®gicas", que llevan a preconizar una "Iglesia que nace del pueblo". Asimismo, al entender el concepto de pueblo como categor¨ªa social, los pobres resultar¨ªan siempre "agradables a Dios" por el hecho de ser pobres "y no tanto por ser buenos".

Betencourt cuestiona "qu¨¦ sentido tiene la declaraci¨®n de Boff de que.prefiere caminar con la Iglesia a seguir su teolog¨ªa", y se pregunta por qu¨¦ querer dar apariencia de legitimidad a algo que no es leg¨ªtimo.

El padre Libanio, por el contrario, elogia la "originalidad teol¨®gica" de Boff y afirma que la "Iglesia popular" no s¨®lo "no distorsiona las ense?anzas del Concilio Vaticano II" sobre el pueblo de Dios, "sino que las realiza". La nueva obra de Boff, a?adi¨®, "es el libro de s¨ªntesis de la obediencia libre y de la creatividad teol¨®gica respetuosa y cautelosa".

Por su parte, Boff dijo el jueves pasado: "Durante el a?o de silencio a que fui sometido madur¨¦ bastante y perd¨ª toda la inocencia teol¨®gica al advertir que en los conflictos internos de la Iglesia no s¨®lo prevalecen intereses religiosos sino tambi¨¦n otros objetivos ocultos y no evang¨¦licos".