M¨¢s espectadores que toreros en la enfermer¨ªa

La enfermer¨ªa de la plaza de toros de Las Ventas ha registrado en lo que va de temporada m¨¢s visitas de espectadores que de toreros. Los datos, extra¨ªdos de los partes m¨¦dicos que reflejan todas las intervenciones, son claros. Hasta ayer, los ocho responsables de la enfermer¨ªa hab¨ªan atendido 34 casos. De ellos, solamente dos corresponden a toreros: Ra¨²l Galindo, con una peque?a herida en el escroto, y Jos¨¦ Luis Sese?a, que presentaba una leve contusi¨®n.

Las dem¨¢s personas que visitaron la enfermer¨ªa fueron espectadores. Ninguno presentaba tampoco lesiones graves. Golpes fortuitos, lipotimias y quemaduras de puro suponen la mayor¨ªa de estos casos.

El doctor M¨¢ximo Garc¨ªa de la Torre es el principal responsable de la enf¨¦rmer¨ªa. Le acompa?an otros cinco m¨¦dicos, un ayudante t¨¦cnico sanitario y un anestesista, el doctor Ferrer, que habla ocho idiomas. "Nos es de una enorme utilidad cuando ingresa alg¨²n turista", se?ala Garc¨ªa de la Torre, "aparte de su gran calidad profesional, como la del resto de los que aqu¨ª trabajamos".

Entre todos se reparten 24.000 pesetas por jornada , cantidad que parece irrisoria a Garc¨ªa de la Torre: "Menos mal que somos buenos aficionados, porque se nos prometi¨® una subida hace mucho tiempo y no se ha cumplido"

Hasta el momento, superada ya la tercera parte de la.fer¨ªa, no hay que lamentar ning¨²n percance de los toreros. "Parad¨®jicamente", dice el doctor, "estamos contentos de no trabajar".

El Inclusero: "Soy el mejor"

Uno de los diestros de mayor arte y personalidad, dentro y fuera de la plaza, Gregorio Tebar El Inclusero, se ha quedado sin figurar en los carteles isidriles. Como espectador, afirma que a¨²n no se ha visto nada interesante. Y no le importa afirmar rotundamente que es el n¨²mero uno: "Es que soy el mejor, pero no tengo suerte".

Para ello, se basa, entre otras razones, en las dos magn¨ªficas faenas -de las de mayor impacto en la pasada temporada- que realiz¨® en la Monumental el ¨²ltimo domingo de agosto de 1985. "Estoy muy orgulloso y satisf¨¦cho de aquella actuaci¨®n, pero ese d¨ªa no estaban en la plaza ni Manuel Chopera ni su hijo, Pablo, un aut¨¦ntico aficionado", comenta; "de haber estado ellos, yo toreaba en esta feria. Pero, la suerte, una vez m¨¢s, me volvi¨® la espalda".

No obstante, El Inclusero sigue confiando en s¨ª mismo: "He de hacerlo. Soy el mejor y, a largo plazo, la verdad siempre se impone".

El novillero Juan Rivera, a punto de acabar el servicio militar, desea volver a Las Ventas. "Aqu¨ª di una vuelta al ruedo en el pasado mes de marzo. Tal vez no fuera m¨¦rito suficiente", asegura, "para entrar en San Isidro. Espero una nueva oportunidad".

Algo as¨ª espera el novillero Juan Andr¨¦s Gonz¨¢lez, triunfador del ¨²ltimo Festival de la Polic¨ªa Municipal, en el que cort¨® dos orejas. "Es dif¨ªcil torear en Madrid porque es mucha la oferta y pocos los puestos. A ver si alcanzo alguno".

El veterano periodista Mat¨ªas Prats, comentarista de deportes y de toros, estaba jubiloso tras la corrida del d¨ªa 15. Pronostica nuevas tardes de ¨¦xitos: "As¨ª va a ser, porque, una vez comenzada la racha, ¨¦sta seguiri¨¢. Al tiempo".