Serenidad y buen baile

En la excelente oferta de estas jornadas se encuentra la primicia del grupo de danza del c¨¦lebre maestro Peter Goss en Espa?a, un core¨®grafo que presenta una danza evolucionada pero sin rupturas. Entre todas sus obras hay una continuidad sostenida por el m¨¦todo empleado al concebirlas, germen de una definici¨®n estil¨ªstica que seguramente llegar¨¢ para Peter Goss, uno de esos artistas que calladamente han buscado su lenguaje particular.En danza, para esto, es necesario encontrar primero un sistema que abarca estilo, t¨¦cnica, entrenamiento y c¨®digo de pasos. Clarificaci¨®n del trabajo cotidiano que o s¨®lo aparece cuando se ha asumido la investigaci¨®n con suficiente experiencia y conocimiento de causa.

Peter Goss fund¨® compa?¨ªa en 1972 y han pasado 14 a?os de experimentaci¨®n y b¨²squeda sistem¨¢tica cuyo resultado actual impresiona por su serenidad. Si algo ha tenido claro Goss es que no se trata de inventar a secas, sino de reordenar la herencia y sumarle imaginaci¨®n y, en su caso particular, poes¨ªa, pues sus creaciones tienen un trasunto l¨ªrico donde el bail¨¦ funciona como veh¨ªculo de elevaci¨®n, tanto en lo estrictamente f¨ªsico como en el superobjetivo de la danza.

Su formaci¨®n ecl¨¦ctica madur¨® en Nueva York rodeado de Graham y Limon, pero volvi¨® a Europa a sabiendas de que su danza es m¨¢s culterana que explosiva. Para desarrollar sus ideas, Norteam¨¦rica fue s¨®lo un tr¨¢nsito del aprendizaje. En ¨¦l toda renovaci¨®n pasa de lo epid¨¦rmico y se implanta en una po¨¦tica donde cada vez gana m¨¢s terreno la interioridad.

Sus coreograf¨ªas son muy estrictas pero respiran una cierta libertad, pues todo despliegue virtuoso est¨¢ supeditado a una intenci¨®n l¨ªrica cuyo defecto es una prolongaci¨®n de los tiempos lentos. Sus bailarines navegan en un mar de la tranquilidad donde las emociones van desgran¨¢ndose hacia el p¨²blico con una m¨ªmica contenida.

La inclusi¨®n de los tambores hind¨²es es un acierto indiscutible. En Ties abren y cierran el espect¨¢culo como una ancestral llamada que redondea el mensaje de la danza. El toque de tambor, at¨ªpico para bailar, es bien empleado por Goss para forzar una danza fuera de tiempo; esto y el no cargar evoluciones mim¨¦ticas de grupo pueden ser buenos datos para desentra?ar el car¨¢cter de su danza. As¨ª como se mezclan los tambores con el aria para contratenor de Purcell, en los bailarines se da tambi¨¦n esta convivencia de formaci¨®n y procedencia diversas. Esto lo da una relajaci¨®n creativa que en Gamos es muy patente. Peter Goss ha escogido a las personas por su capacidad de interpretaci¨®n, consiguiendo que en su compa?¨ªa exista el esp¨ªritu cosmopolita muy propio del pa¨ªs de nuestros d¨ªas, pero bien llevado al campo de una seria reflexi¨®n.

Aller-retour, la nueva coreograf¨ªa que usa como fondo a Schuber va hacia un expresionismo m¨¢s refinado. Compuesta casi exclusivamente en diagonales, relata con intensidad c¨®mo se rompe la cadena de la vida confiando en el dibujo de los cuerpos y desarrollando una atm¨®sfera de color unitaria para todas sus obras.