Cavaco Silva impone disciplina y silencio a los socialdem¨®cratas portugueses

El Partido Social Dem¨®crata portugu¨¦s (PSD), en el poder en Lisboa, desde noviembre ¨²ltimo, vive este fin de semana uno de los congresos nacionales m¨¢s pacif¨ªcos de su turbulenta historia. Anibal Cavaco Silva, el presidente que los socialdem¨®cratas eligieron en su congreso de Figueira da Foz, en mayo de 1986, para salvar una crisis que parec¨ªa irreversible en el partido fundado en 1974 por Francisco Sa Carneiro, ha conseguido una haza?a que parec¨ªa imposible hace un a?o: llevar al PSD al poder sin alianzas e imponer disciplina y silencio a los barones del partido.

Incluso han sido acallados los grupos y fracciones que, desde la muerte de Sa Carneiro, se dedicaban a decapitar las sucesivas direcciones en cada congreso: Francisco Pinto Balsemao, Carlos Mota Pinto y, Rui Machete conocieron la guillotina partidaria.Cavaco Silva dio a entender, desde el inicio, que no se dejar¨ªa pisotear por las rivalidades y los juegos de influencia interna. La derrota de su candidato a la presidencia de la Rep¨²blica, el democristiano Freitas do Amaral, lejos de debilitar el prestigio y autoridad del actual presidente del PSI) y del Gobierno, ha contribuido a confirmarlo como el ¨²nico l¨ªder del centro-derecha y de la derecha.

Los 1.300 delegados, reunidos en Lisboa del viernes al domingo, son demasiado conscientes de la fuerza del l¨ªder y tambi¨¦n de su determinaci¨®n a no compartir con nadie el mando, como para que alguien se atreva a disputarle la elecci¨®n de los nuevos dirigentes. El sector cr¨ªtico, liderado por Francisco Pinto Balsemao, ausente en Oviedo, ha sido duramente castigado por la infidelidad de algunos de sus miembros, que han sido expulsados del partido tras haber apoyado p¨²blicamente la candidatura de Mario Soares.

La cuesti¨®n de las futuras alianzas dominar¨¢ el congreso y permitir¨¢ el afloramiento de algunas cr¨ªticas -indirectas- a la pol¨ªtica de Cavaco: los presidentes de los Gobiernos auton¨®micos de Azores y Madeira, Joao Bosco Mota Amaral y Alberto Joao Jardim, encabezan una moci¨®n que, con el pretexto de defender la autonom¨ªa del partido, rechaza la alianza configurada en las elecciones presidenciales entre el PSD y el derechista Centro Democr¨¢tico y Social (CDS).

Pero la situaci¨®n del partido, minoritario en el Parlamento, ha revelado en los ¨²ltimos meses todos sus inconvenientes, y Cavaco Silva dej¨® translucir que estar¨ªa dispuesto a "someterse al sufragio popular" con la esperanza de conquistar la mayor¨ªa absoluta. El presidente Soares ha contestado inmediatamente que no disolver¨¢ el Parlamento por la simple demanda del primer ministro, y que estar¨ªa dispuesto a intentar encontrar "otra f¨®rmula de Gobierno en el contexto de la actual representaci¨®n parlamentaria".

Tanto en un caso como en otro -elecciones anticipadas o cambio de mayor¨ªa-, la ¨²ltima palabra corresponde a los eanistas del PRD, y una de las cosas que los estados mayores pol¨ªticos se preparan a leer entre las l¨ªneas de las resoluciones del congreso del PSD es el futuro de las relaciones entre el actual Gobierno y el partido del general Eanes.