Una ni?a de 11 a?os asegura que su familia la tiene encadenada y la maltrata
Herminia Jim¨¦nez, de 11 a?os, fue recogida el pasado mi¨¦rcoles en la calle de Hermanos Garc¨ªa Noblejas por la polic¨ªa cuando intentaba liberarse de una cadena atada con dos candados a los tobillos. La ni?a asegur¨® que habitualmente era encadenada y maltratada en la chabola donde vive con sus padres y 15 hermanos. El juzgado de guardia decret¨® la libertad de los padres de la peque?a, que fue puesta a disposici¨®n del Tribunal Tutelar de Menores, seg¨²n inform¨® la polic¨ªa.
La polic¨ªa encontr¨® a la ni?a, descalza, alrededor de las 10.30, cuando se encontraba sentada frente al n¨²mero 111 de la calle de Hermanos Garc¨ªa Noblejas e intentaba liberarse de la cadena. Herminia fue trasladada a la casa de socorro, donde se le apreciaron leves contusiones en los dos brazos y en un tobillo.La peque?a asegur¨®, seg¨²n inform¨® la polic¨ªa, que era maltratada por sus padres y que habitualmente era encadenada por los pies con un extremo sujeto con un clavo a la pared de la chabola en que reside con sus padres y 15 hermanos.
Los padres de Herminia, que fueron detenidos en un primer momento por la Polic¨ªa, declararon que encadenaban a la ni?a porque se, escapaba diariamente y ten¨ªan miedo de que le pasara algo. La ni?a, que se qued¨® aterrorizada cuando vio a sus padres en la comisar¨ªa, explic¨® que sal¨ªa a buscar comida, pero que volv¨ªa siempre a dormir.
Los hermanos de Herminia, que viven en una zona de chabolas e infraviviendas situada entre la avenida de Guadalajara y Hermanos Garc¨ªa. Noblejas, aseguraron ayer que su hermana se escapa de casa desde que ten¨ªa cuatro a?os y que han presentado varias denuncias por su desaparici¨®n en la comisar¨ªa. "Est¨¢ un poco mal", dijo su hermana Mari Luz, de 16 a?os, "dice que quiere ser una golfa y se marcha de casa. La at¨¦ yo porque hab¨ªa salido corriendo y casi la pilla un coche; yo estaba asustada".
Toda la familia vive en una amplia nave cerrada con palos y cartones. En el interior de la casa apenas hay muebles y numerosas colchonetas se amontonan en los laterales. El padre de la ni?a se dedica a recoger chatarra y cartones y la madre echa la buena ventura por las calles.
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