Gorospe logra en Saint-Etienne la quinta victoria espa?ola

ENVIADO ESPECIAL, Juli¨¢n Gorospe record¨® ayer su ¨¦poca de aficionado y corri¨® al estilo que le hizo ser, a?os atr¨¢s, una promesa de muchos quilates. Se escap¨® en el kil¨®metro SO, en medio de un vendaval, coron¨® en cabeza cuatro puertos de monta?a y lleg¨® a la meta, 130 kil¨®metros despu¨¦s con notable ventaja, Ipese a la atroz e involuntaria persecuci¨®n que emprendieron los hombres -de atr¨¢s. No es que Gorospe significara un peligro para las aspiraciones de Hinault y Lemond -estaba a casi dos horas en la general-, sino que ¨¦stos decidieron disputarse el Tour en un descenso temerario.

Gorospe eligi¨® la etapa de ayer para atacar porque as¨ª estaba decidido en el eq¨²ipio. Necesitaba el triunfo porque ya son muchos los a?os que lleva de profesional sin confirmar lo que promet¨ªa.Antes de aficionado, se escapaba de salida, no tem¨ªa a nadie, y lo ganaba todo. Casi como ayer.

Despu¨¦s se qued¨®, simplemente, en un buen contrarrelojista.

Juli¨¢n Gorospe fue el elegido por Ech¨¢varri, el director del Reynolds, para intentar la victoria porque era el hombre menos castigado deI equipo despu¨¦s de pasar los Pirineos y los Alpes. En la alta monta?a, sabedor de que no ten¨ªa nada que hacer, Gorospe se dedic¨® a subir a su ritmo, cuid¨¢ndose s¨®lo de no entrar fuera de control. Sacrific¨® la contra reloj de hoy, donde pod¨ªa hacer un gran papel -fue cuarto en la celebrada en Nantes- por el ¨¦xito de ayer. En cualquier caso era cambiar la posibilidad de una buena clasificaci¨®n por una posible victoria.

Ech¨¢varri dijo que lo que hab¨ªa hecho ayer Gorospe "era adelantar la contra reloj un d¨ªa". El Reynolds tambi¨¦n necesitaba un triunfo porque ya lo hab¨ªan conseguido el Teka (Chozas y Sarrapio) y el Seat (Cabestany). Ahora queda el Zor por estrenarse.

Soin ya cinco victorias de etapa espa?olas en este Tour porque Delgado (PE)M) tambi¨¦n se anot¨® una. Efectivamente, Gorospe corri¨® ayer contra reloj: "Lo que hice fue ir a tope en llano para sacar la m¨¢xima ventaja, porque sab¨ªa que en la monta?a me coger¨ªan. Al final, cuando me dijeron que Herrera iba por m¨ª, cre¨ª que mi esfuerzo no valdr¨ªa para nada".

Gorospe se vio beneficiado de que la lucha en el pelot¨®n no se desecandenara hasta el final. Lleg¨® a tener una m¨¢xima ventaja de 16.20 minutos (kil¨®metro 103), que se qued¨® en 2.04. Fue Herrera el primero en saltar del grupo, escalando el puerto de primera categor¨ªa que hab¨ªa a 30 kil¨®metros de la meta. En el descenso, Hinault atac¨® a Lemond y Lemond a Hinault. Aquello fue una locura, en la que se vieron envueltos todos los gregarios de La Vie Claire.

Una vez era Baucir el que se jugaba. la vida por Lemond y otra, Bernard el que hac¨ªa lo mismo por Hinault. 100 metros adelante, 200 atr¨¢s, las posiciones se intercambiaban, eso se hab¨ªa convertido en una ruleta rusa con una ¨²nica obsesi¨®n: ganar el Tour. ?se fue el testimonio de los corredores que tuvieron el valor de bajar tras ellos y el de la c¨¢mara de la televisi¨®n habilitada en un helic¨®ptero. Nadie m¨¢s pudo seguirles.

Ya no hay pacto entre Hinault y Lemond, y el primero anduvo ayer atento para encontrar el momento del ataque. En la monta?a siempre estuvo por delante y en una bonificaci¨®n volante le quit¨® dos segundos a Lemond.

Ambos se controlaron menos al final. Hinault despreci¨® el primer gran descenso de la etapa para atacar porque abajo esperaba un vendaval, el siguiente tambi¨¦n porque era demasiado suave y, en el ¨²ltimo, a cuyo t¨¦rmino estaba la meta, puso a prueba la temeridad de Lemond. El Tour ha comenzado de nuevo.

D¨ªa decisivo

Hinault manifest¨® que hoy ser¨¢ un d¨ªa decisivo. Cada uno correr¨¢ por su cuenta. La ambici¨®n y el coraz¨®n ser¨¢n decisivos en el rendimiento de cada corredor. "Si a falta de 10 kil¨®metros para el final mi ventaja sobre Lemond es superior al minuto, ser¨¦ capaz de dejarme la vida en el empe?o", ha dicho Bernard Hinault. Lemond, por su parte, cree que su ventaja es suficiente para ganar el Tour. Al d¨ªa siguiente ser¨¢ la subida al Puy de Dome, donde estar¨¢ la meta.

Sea cual fuere el resultado, esta cima marcar¨¢ un hecho hist¨®rico: un corredor, Bernard Hinault, ganar¨¢ por sexta vez el Tour de Francia o, por primera vez, en 73 ediciones, el nombre de un estadounidense, Greg Lemond, aparecer¨¢ entre sus vencedores.