El nuevo Museo Freud de Londres reaviva la pol¨¦mica sobre el legado del psicoanalista
, Los seguidores del padre del psicoan¨¢lisis, Sigmund Freud (1856-1919), tienen a partir de ahora un nuevo templo que visitar. Se trata del Freud Museum, abierto al p¨²blico en Londres el 26 de julio, situado en la casa que habit¨® el psicoanalista durante el ¨²ltimo a?o de su vida. La apertura de esta residencia ha reavivado la pol¨¦mica sobre el legado personal del doctor, iniciada en 1982, a la muerte de su hija y disc¨ªpula Anna Freud.
En 1938, cinco a?os despu¨¦s de que Hitler prohibiera el psicoan¨¢lisis, Sigmund Freud dej¨® Austria, huyendo de la persecuci¨®n nazi a los jud¨ªos, y se instal¨® con su familia en el barrio residencial de Hampstead, en el n¨²mero 20 de Maresfield Garden, al noroeste de Londres. Para poder salir de Viena, el padre del psicoan¨¢lisis tuvo que firmar un documento que certificaba que el Gobierno nazi no hab¨ªa ejercido ninguna presi¨®n sobre el psicoanalista y su familia.Freud se llev¨® a Londres una buena parte de sus pertenencias personales, entre ellas el div¨¢n en el que se tumbaban sus pacientes y que 45 a?os m¨¢s tarde ser¨ªa motivo de discordia entre sus seguidores. En 1971 se abri¨® el Museo Freud de Viena y los austriacos pidieron a Anna Freud el retorno, entre otras cosas, del famoso div¨¢n. La petici¨®n fue rechazada. Cuando Freud muri¨® en Londres el 23 de septiembre de 1939, al a?o de llegar a la capital brit¨¢nica, su hija, tambi¨¦n psicoanalista, hered¨® todo el patrimonio personal de su padre. Anna, nacionalizada brit¨¢nica, guard¨® y recre¨® el mundo freudiano, habitando la casa londinense durante 40 a?os, hasta su muerte en 1982.
Mientras vivi¨® Anna, los austriacos no consiguieron convencerla de que el div¨¢n y otros objetos pertenec¨ªan a Viena, donde el psicoanalista hab¨ªa desarrollado sus teor¨ªas. El ¨²ltimo intento del Museo Freud de Viena se produjo el a?o pasado, cuando este centro solicit¨® de nuevo el div¨¢n para exhibirlo en una exposici¨®n que, baja el t¨ªtulo Sue?os y realidad, se le dedic¨® a Sigmund Freud en la capital austriaca. Pero ni las autoridades brit¨¢nicas ni la Fundaci¨®n Sigmund Freud Archive se fiaron de la solicitud. Cuando Anna falleci¨® don¨® la residencia familiar y el material heredado a la fundaci¨®n citada anteriormente, en la que pronto surgieron discrepancias sobre qui¨¦n deb¨ªa guardar la correspondencia entre padre e hija.
El div¨¢n
Ahora, con la apertura del Museo de Londres, los directivos del Museo de Viena han desistido del div¨¢n pero contin¨²an las diferencias sobre las cartas y documentos personales del padre del psicoan¨¢lisis. Hans Hollein y Harald Leupold-Lowenthal, del Museo Freud de Viena, reconocieron en la apertura de la casa de Freud en Londres que sus intentos hab¨ªan fracasado y que el div¨¢n, por ello, permanecer¨¢ en la capital brit¨¢nica. Los dos estuvieron en Londres para la inauguraci¨®n del nuevo museo.
La correspondencia personal de Freud, entre la que se encuentran unas 2.000 cartas, est¨¢ ahora depositada en la caja fuerte de un banco del Reino Unido y ser¨¢ repartida en el futuro entre la biblioteca del Congreso americano y el nuevo museo londinense, donde se controlar¨¢ el acceso a su estudio. Miles de documentos del psicoanalista permanecen tambi¨¦n en la biblioteca del Congreso, donde se vigila rigurosamente el estudio de los mismos.
Dos tendencias han surgido entre los seguidores del psicoanalista, los europeos, que recelan del material depositado en EE UU, y los del nuevo continente, a donde ir¨¢ a parar la mayor parte de la correspondencia. Varios trabajos han sido publicados en el Reino Unido que ponen en entredicho la vida privada del psicoanalista y su talla intelectual.
El museo abierto recientemente en Londres contiene casi todos los muebles, incluido el div¨¢n, que Freud se llev¨® de Austria a Londres, as¨ª como todos los objetos de decoraci¨®n y uso privado que el padre del psicoan¨¢lisis dej¨® a su muerte. Resalta a primera vista la predilecci¨®n del maestro por lo oriental. Tejidos, fotograf¨ªas, manuscritos y objetos repartidos por toda la casa que su hija mantuvo con lealtad y que ahora se han colocado meticulosamente en su lugar de anta?o para satisfacer el inter¨¦s de los seguidores.
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