Kohl deplora la existencia del "monumento a la inhumanidad"

Helmut Kohl, canciller (jefe de Gobierno) de la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA), deplor¨® ayer la existencia del muro de Berl¨ªn, al que calific¨® de "monumento a la inhumanidad", en un discurso pronunciado en el Reichstag -sede del antiguo Parlamento-, de la antigua capital alemana, en el marco de los actos conmemorativos del 25? aniversario del comienzo de la construcci¨®n de la barrera que divide en dos a la ciudad. A pesar de sus duras cr¨ªticas, Kohl manifest¨® su disposici¨®n al di¨¢logo y a la cooperaci¨®n con la Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana (RDA) "en beneficio de todos los alemanes" y subray¨® la necesidad de impulsar la distens¨ª¨®n en Europa.Cuando los berlineses despertaron el 13 de agosto de 1961, se encontraron con una ciudad separada en dos por alambradas y barreras construidas por los alemanes orientales, en un intento de contener el ¨¦xodo masivo de sus ciudadanos hacia el Oeste, estimado hasta entonces en 2,7 millones de personas. El muro tiene una extensi¨®n de 160 kil¨®metros.

El acto central de las conmemoraciones de la construcci¨®n de esa barrera se desarroll¨® ayer en el Reichstag, a pocos metros del imuro, donde intervinieron, adem¨¢s del canciller federal, el presidente de la Internacional Socialista, Willy Brandt -que era alcalde de Berl¨ªn Oeste cuando se inici¨® la construcci¨®n del muro-, y el actual alcalde, Eberhard Diepgen.

"La RFA nunca se resignar¨¢ a la divisi¨®n de Berl¨ªn, de Alemania y de Europa, a la existencia del muro y de las alambradas. No renunciar¨¢ jam¨¢s al objetivo de todos los alemanes: unidad, derecho y libertad", asegur¨® Kohl en su discurso, en el que conden¨® a los dirigentes de la RDA, "que tienen el cinismo de celebrar esta fecha con un pompa de aires militaristas".

El canciller federal alem¨¢n tuvo un recuerdo para las 74 personas que perdieron la vida en su intento de cruzar el muro para huir a Occidente. "Que la RDA", dijo Kohl, "haya necesitado construir este muro dice m¨¢s sobre el sistema comunista que muchas consideraciones abstractas".

Kohl reafirm¨® que Bonn no renunciar¨¢ al pre¨¢mbulo de la Constituci¨®n de la RFA, que obliga al Gobierno a trabajar en favor de la reunificaci¨®n alemana, y que tampoco se puede pensar que la RFA reconozca la nacionalidad alemana oriental. La RDA ha convertido estas dos reivindicaciones en una condici¨®n para la normalizaci¨®n con Bonn. Precisamente ayer los diputados del Partido Verde de la RFA, tras denunciar la existencia del muro, pidieron que Bonn reconozca la ciudadan¨ªa de la RDA, como primer paso para superar la divisi¨®n alemana.

El l¨ªder socialdem¨®crata y ex canciller Willy Brandt se?al¨® en su intervenci¨®n que, a pesar de los a?os transcurridos, "el muro no ha perdido nada de su absurda anormalidad". Dijo que, para superarlo, Bonn debe cooperar activamente en eliminar tensiones y fomentar, "m¨¢s all¨¢ de la rutina", la cooperaci¨®n entre los dos Estados. El alcalde berlin¨¦s, Diepgen, pidi¨® "m¨¢s puertas en el muro" y mayores libertades de tr¨¢nsito para los alemanes.

Poco antes de que tomara la palabra Kohl, una mujer que emigr¨® de la RDA hace dos a?os, se apoder¨® del micr¨®fono para pedir que las autoridades germano orientales dejen que a sus dos hijos se reunan con ella. La protagonista del incidente se llama Jutta Gallus-Schmidt, una antigua prisionera pol¨ªtica, cuya liberaci¨®n fue comprada por la RFA.

Seis antiguos guardias germano orientales y varias decenas de berlineses occidentales colocaron coronas de flores ante las cruces que se?alan junto al borde occidental del muro los lugares donde fallecieron los 74 fugitivos abatidos en los ¨²ltimos 25 a?os cuando intentaban huir del Este.