Laberintos del terror

Patxo Unzueta, en su art¨ªculo Laberintos del terror (EL PA?S, 27 de septiembre de 1986), afirma que ETA "en los a?os setenta evolucionar¨ªa hacia posiciones m¨¢s abiertamente militaristas, pero s¨®lo desde finales de esa d¨¦cada, una vez aprobada la Constituci¨®n y el estatuto de autonom¨ªa, lo espec¨ªficamente militar absorber¨ªa definitivamente a lo pol¨ªtico", y yo tengo que disentir de esta simple clasificaci¨®n y su encuadramiento en el tiempo.La llamada entonces ETA-V Asamblea, con la ayuda de unos cuantos simpatizantes fan¨¢ticos de Madrid, realiz¨® el atentado de la cafeter¨ªa Rolando, sita en la calle del Correo, el 13 de septiembre de 1974. En ¨¦l murieron inmediatamente 12 personas y resultaron heridas 84; al cabo de dos a?os falleci¨® la decimotercera. La mayor¨ªa de las v¨ªctimas fueron civiles completamente ajenos a la, lucha etarra. Con este atentado, cuyo proceso detallo en mi libro Viernes y 13 en la calle del Correo (Planeta, 1980), ETA comienza su psic¨®pata din¨¢mica de atentados indiscriminados.

El constante olvido del atentado de la calle del Correo, cada vez que un comentarista trata el tema del terrorismo, me indigna y me sorprende siempre. No s¨®lo ETA tuvo el cinismo de negar su autor¨ªa 37 d¨ªas m¨¢s tarde de cometido y la izquierda se ha hecho sorda al ,an¨¢lisis de lo sucedido en aquel maldito proceso, sino que ahora, transcurridos m¨¢s de 10 a?os del tema, parece que jam¨¢s haya sucedido. Trece muertos, 84 heridos, 22 procesados, detenciones, torturas, meses y a?os de prisi¨®n para la mayor¨ªa de los que fuimos implicados han desaparecido de la historia por arte de la amnesia que padece el cuerpo pol¨ªtico de izquierdas de nuestro pa¨ªs. Y en esta mala memoria, en esta culpabilidad nunca asumida ni analizada, reside el principal, problema para erradicar el terrorismo, del Pa¨ªs Vasco.

Esa izquierda, con absoluta miop¨ªa, dio el visto bueno a todas las acciones de ETA, fuesen cuales fuesen. Si el atentado era tan imposible de asumir como el de la calle del Correo, se negaba la autor¨ªa. Esta t¨¢ctica del avestruz ha

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llevado a la confusi¨®n que priva hoy en los c¨ªrculos abertzales.

Cuando publiqu¨¦ mi libro fue imposible provocar una discusi¨®n pol¨ªtica seria sobre el tema entre los principales implicados y sus seguidores. Hoy, el c¨¢ncer terrorista ha llevado a la agon¨ªa a diversos sectores pol¨ªticos vascos y no vascos, heridos de muerte por su inoperancia y complacencia con los que entonces se llamaban luchadores antifascistas, aunque matasen m¨¢s componentes del pueblo sojuzgado que enemigos, y que hoy se han convertido en una banda de fan¨¢ticos asesinos. Pero es que los errores siempre se pagan.- Escritora y abogada.