La huelga de tip¨®grafos de Rupert Murdoch se radicaliza

La huelga de los tip¨®grafos de los cuatro peri¨®dicos londinenses del magnate de la Prensa mundial Rupert Murdoch puede convertirse en una segunda edici¨®n del conflicto minero, con el rechazo, por segunda vez en tres meses, por parte de los trabajadores, de la oferta final de la empresa para terminar el conflicto.

Los dos sindicatos que participan en el conflicto desde hace ocho meses y medio, Sogat 82 (Society of Graphical and Allied Trades) y National Graphic Assoc¨ªation (NGA), rechazaron esta semana una oferta de compensaciones econ¨®micas por despidos de 58 millones de libras (unos 11.600 millones de pesetas), que Murdoch consideraba como final."Los sindicatos han ejercido su derecho democr¨¢tico al voto y han rechazado la oferta, y yo, ahora, ejerzo el m¨ªo y retiro esa oferta, que, desgraciadamente, era la ¨²ltima. El asunto est¨¢ cancelado", manifest¨® el presidente de News International, editora de los diarios The Times y The Sun y de los dominicales News of the World y Sunday Times, con una circulaci¨®n total de m¨¢s de 15.000.000 de ejemplares.

El resultado de la votaci¨®n, la segunda que se celebra desde el pasado mes de junio, no dej¨® lugar a dudas sobre los deseos de los afiliados a los do sindicatos, que resumen su posici¨®n en una frase: "Queremos nuestros puestos de trabajo, no dinero". Los afiliados a Sogat 82 rechazaron la oferta por 2.372 votos en contra y s¨®lo 960 a favor, un porcentaje en contra superior al registrado en junio, a pesar de que la secretaria general del sindicato, Brenda Dean, hab¨ªa recomendado la aceptaci¨®n de la oferta de la empresa. La NGA se pronunci¨® en contra por 565 votos contra 116.

El enfrentamiento entre sindicatos y Murdoch comenz¨® a principios de a?o, como consecuencia de la decisi¨®n de la empresa de trasladar sus instalaciones a Wapping, en el este de Londres, y abandonar sus tradicionales edificios en Fleet Strect. Los afiliados a los dos sindicatos, que no s¨®lo agrupan a tip¨®grafos, sino a casi todo el personal no period¨ªstico de los peri¨®dicos, se negaron a permitir la utilizaci¨®n de las terminales por parte de la redacci¨®n y se declararon en huelga. La respuesta de Murdoch fue fulminante: despedir a los 5.500 trabajadores despu¨¦s de asegurarse una nueva n¨®mina de personal no sindicado de afiliados al sindicato de electricistas y t¨¦cnicos de electr¨®nica, que tienen firmada una cl¨¢usula con la empresa por la que renuncian a la huelga.

En la actualidad, y a pesar de la violencia de los piquetes en la fortaleza de Wapping, como se conoce a la nueva planta impresora, la empresa produce y distribuye los cuatro t¨ªtulos y, seg¨²n sus ejecutivos, gana m¨¢s dinero que nunca.