El Congreso pide respeto al SALT II
La Comisi¨®n de Conciliaci¨®n del Senado y de la C¨¢mara de Representantes acord¨® en la madrugada de ayer un proyecto de presupuesto de defensa de Estados Unidos para el a?o fiscal 1987, que comenz¨® el 1 de octubre, de 291.000 millones de d¨®lares (unos 38 billones de pesetas), es decir, 28.500 millones menos de lo solicitado por el presidente, Ronald Reagan, y el menor incremento en sus seis a?os de mandato. La comisi¨®n recorta lo que ped¨ªa Reagan para su programa de guerra de las galaxias, y estima en el texto adoptado que el respeto de los l¨ªmites fijados con la URSS por el tratado SALT II de 1979, nunca ratificado por el Congreso, va en inter¨¦s de EE UU.
La comisi¨®n deb¨ªa ayer completar los detalles formales sobre la partida destinada en 1987 al programa SDI (Iniciativa de Defensa Estrat¨¦gica), aunque hab¨ªa llegado al compromiso de una dotaci¨®n de 3.500 millones de d¨®lares, un recorte de 1.800 millones sobre los 5.300 millones que solicitaba Reagan. Los miembros de la comisi¨®n llegaron incluso a hablar el martes de recortar a¨²n m¨¢s, esta partida tras el fracaso de la cumbre de Reikiavik.El recorte en el programa de la SDI acompa?a a una toma de postura de ambas c¨¢maras a favor del respeto del tratado SALT II. Tras Re¨ªkiavik, indicaron diversos medios del Congreso, van a aumentar las presiones de los legisladores norteamericanos sobre la Casa Blanca para llegar a acuerdos de control de armamentos con la URSS.Ahora que Reagan se ha negado a negociar la SDI, disminuir¨¢ el apoyo a largo plazo de los legisladores a este programa. "Si se piensa [en la SDI] como un comod¨ªn negociador, el programa se puede considerar desde un punto de vista muy diferente que si es un sistema desplegable que cuesta un bill¨®n de d¨®lares", dijo el republ¨ªcano Edward J. Markey. Sin embargo, otros republicanos y expertos en control de armamentos han escrito a Reagan para pedirle que haga operativa cuanto antes la SDI.
El compromiso entre el Senado y la C¨¢mara, que debe a¨²n pasar por una votaci¨®n definitiva del Congreso, prev¨¦ tambi¨¦n dinero para la construcci¨®n de 12 gigantescos misiles intercontinentales MX, misiles bal¨ªsticos intercontinentales m¨®viles (M¨ªdgetman) y nuevas armas qu¨ªmicas. Reagan amenaz¨® con vetar el anterior proyecto de presupuesto, pero ante las nuevas cifras, algo m¨¢s altas de las propuestas por la C¨¢mara, la Casa Blanca no quiso ayer pronunciarse. Este proyecto de presupuesto supone un aumento de 4.000 millones de d¨®lares respecto al a?o anterior, es decir, el menor incremento logrado en la presidencia de Reagan y 5.000 millones menos que en 1985. La raz¨®n hay que encontrarla en los esfuerzos del Congreso por reducir el d¨¦ficit p¨²blico.
Cient¨ªficos contra la SDI
Por otra parte, unos 7.000 cient¨ªficos norteamericanos -entre ellos 15 premios Nobel- de 110 centros de investigac¨ªon han decidido expresar su "fuerte oposici¨®n" a la SDI y han prometido rechazar los fondos que les lleguen para este programa.
"Tras el terrible fracaso que acabamos de registrar en Reikiavik, vamos a poder ampliar nuestros esfuerzos, para extender la idea de que la SDI es una cosa mala", declar¨® al peri¨®dico The Washington Post John Kogut, profesor de f¨ªsica de la Universidad de Illinois.
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