Par¨ªs y Bonn impulsan la carrera espacial europea

El Gobierno de Jacques Chirac ha decidido dar un nuevo impulso a la participaci¨®n europea en la carrera espacial. Un consejo interministerial presidido por Chirac decidi¨®, el pasado viernes, autorizar al Centro de Estudios Espaciales para que comprometiera una participaci¨®n francesa de un 45% en la financiaci¨®n de la fase de definici¨®n de la nave espacial tripulada europea Hermes. Simult¨¢neamente, el Gobierno de la Rep¨²blica Federal de Alemania ha confirmado a Francia que iba a participar en un 30% en la financiaci¨®n de estos estudios. Chirac, con motivo de esta decisi¨®n, ha expresado su convicci¨®n de que "Europa debe disponer de un programa aut¨®nomo de vuelos tripulados".

El avi¨®n espacial Hermes estar¨¢ tripulado, por cinco o seis personas. Su puesta en ¨®rbita se realizar¨¢ mediante la lanzadera europea Arianne V. Su funcionamiento est¨¢ previsto para el a?o 1996. Tanto el avi¨®n como la lanzadera forman parte, junto con el proyecto espacial Columbus (integrado en el Spacelab norteamericano), de una tr¨ªada de ingenios espaciales europeos que las autoridades francesas han calificado de indisociables e indispensables.El Hermes est¨¢ concebido como un avi¨®n espacial ligero, con un peso de 15 toneladas y una gran capacidad de maniobra. Sus creadores piensan en vuelos que puedan durar hasta un mes, en los que se realizar¨¢n experiencias cient¨ªficas y operaciones de transporte y mantenimiento de las futuras estaciones e industrias orbitales. La propia definici¨®n t¨¦cnica del avi¨®n ha sido, sin embargo, uno de los puntos de fricci¨®n entre alemanes occidentales y franceses.

La decisi¨®n definitiva sobre el programa espacial europeo, que comprende la fabricaci¨®n de los tres ingenios, deber¨¢ tomarse en la primavera pr¨®xima. Los socios europeos de Francia, sin embargo, albergan todav¨ªa algunas dudas. El compromiso adoptado el viernes por la RFA, por ejemplo, no prejuzga que el Gobierno de Bonn se decida en la primavera por la construcci¨®n del Hermes, aunque los responsables franceses se muestran optimistas y creen que bastar¨¢ con facilitar una buena participaci¨®n de la industria alemana occidental en el proyecto para garantizar la decisi¨®n favorable. Por el momento son dos industrias francesas, Aeroespacial y Dassault, las que han recibido el encargo del proyecto.

La carta de la independencia

En los pr¨®ximos d¨ªas, en una reuni¨®n de la Agencia Espacial Europea y en la cumbre francoalemana occidental prevista para finales de mes, deber¨¢ decidirse si se pone en marcha el conjunto de los proyectos. Francia, comprometida con este 45% de los estudios previos del Hermes (que viene a representar unos 2.700 millones de pesetas), jugar¨¢ fuerte la carta de la independencia europea en la carrera espacial con los sovi¨¦ticos y los norteamericanos, con el deseo, adem¨¢s, de acentuar su liderazgo entre los pa¨ªses del continente.El conjunto de los proyectos espaciales europeos comportar¨¢ unas inversiones aproximadas de 50.000 millones de francos (un bill¨®n de pesetas). El proyecto Ariane V es el m¨¢s costoso, con 18.000 millones de francos. El Hermes y el Columbus tienen prevista una inversi¨®n de 15.000 millones cada uno. La participaci¨®n francesa en el proyecto global se estima que podr¨ªa alcanzar al 35%. La RFA se ha comprometido ya, en los dos proyectos en marcha (Ariane V y Columbus), en un 22,5% y un 37,5%, respectivamente.