La viuda de Borges crear¨¢ un fundaci¨®n
El centro ser¨¢ "una conspiraci¨®n ¨¦tica y est¨¦tica. para cambiar el mundo"
La vi¨²da de Jorge Luis Borges, Mar¨ªa Koidama, ha anunciado la creaci¨®n de la Fundaci¨®n Jorge Luis Borges, cuya ra¨ªz ser¨¢ "una conspiraci¨®n ¨¦tica y est¨¦tica para cambiar el mundo", seg¨²n hubiera deseado el fallecido escritor argentino. En las mismas declaraciones, Mar¨ªa Kodama manifest¨® que la idea ya la tuvo Borges cuando preparaba su ¨²ltimo libro, Los conjurados. La sede de la f¨²ndaci¨®n ser¨ªa en principio Ginebra, donde el escritor residi¨® los ¨²ltimos seis meses de su vida, antes de morir el pasado 14 de junio.
"Creo que la manera de dar forma a esas charlas que mantuvimos sobre asociaciones y fundaciones es organizar una fundaci¨®n que lleve su nombre y tenga un fin no solamente cultural, sino tambi¨¦n ¨¦tico y est¨¦tico", manifest¨®.La fundaci¨®n ser¨¢ lan centro de investigaci¨®n y documentaci¨®n sobre la obra del escritor argentino, organizar¨¢ conferencias y otorgar¨¢ premios, .pero no solamente a los valores literarios, sino al esfuerzo personal".
La creaci¨®n de la flundaci¨®n fue muy bien acogida entre diversos medios culturales y estudiosos de Borges, declar¨® la viuda de Borges, ""que me hicieron comprender", dijo, "que debo cumplir una misi¨®n con su obra y su pensamiento". Los miembros que formar¨¢n parte de la fundaci¨®n "ser¨¢n cuidadosamente elegidos no solamente en base a una valoraci¨®n literaria, sino por sus valores intelectuales y morales", a?adi¨®.
Seg¨²n la viuda de Borges, la sede de. la fundaci¨®n, cuya organizaci¨®n se encuentra en primera fase, ser¨¢ probablemente Ginebra, la ciudad que Borgestanto am¨®, donde curs¨® sus estudios y donde descubri¨® a autores que le marcaron, y que eligi¨® para vivir en sus ¨²ltimos tiempos, antes de morir, el pasado 14 de junio. "Adem¨¢s, su libro Los conjurados sucede en Ginebra", manifest¨®.
Mar¨ªa Kodama, que se cas¨® con Borges el pasado 26 de abril, se ocupa actualmente de los tr¨¢mites; legales necesarios para constituir la fundaci¨®n, 11que desarrollar¨¢ la idea de Borges de que es necesario iniciar una conspiraci¨®n para cairibiar el mundo hacia bases positivas".
El deber del c¨®mplice
P. S.Mar¨ªa Kodama ha inspirado siempre entre los lectores de Borges una sensaci¨®n de misterio. No es extra?o: presencia silenciosa al lado del escritor ciego en todos sus viajes de los ¨²ltimos a?os, demostr¨® en todo momento una entrega que no es f¨¢cil encontrar. Ella no lo ve as¨ª. No s¨®lo porque el genio del escritor le compensaba todo supuesto sacrificio, sinoporque ella misma, hija de un japon¨¦s de familia de samurais emigrado a la Argentina, tiene de siempre el culto por el deber, pero no un deber m¨ªstico sino un deber como placer. As¨ª accedi¨® a explicarlo, en Gine bra, en un esfuerzo por hablar de Borges poco despu¨¦s de morir, como un deber hacia su memoria.
Esa fue la condici¨®n que puso: no hablar de la muerte deBorges, sino d¨¦ su obra, de sus miejores recuerdos. Entonces cont¨® que su encuentro con Borges hab¨ªa sido, no el de la disc¨ªpula con el maestro, sino el de dos c¨®mplices que en Buenos Aires compart¨ªan el mismo amor por la ¨¦pica, la epopeya. Algo de esa complicidad y de ese amor hay, sin duda, en el deseo de iniciar una conspiraci¨®n para cambiar el mundo.
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