Teher¨¢n niega que existan acuerdos con Washington sobre armamento
El embajador iran¨ª ante las Naciones Unidas, Rajai Jorasani, desminti¨® ayer categ¨®ricamente que ir¨¢n haya negociado con Estados Unidos acuerdos secretor sobre entrega de armamento a Teher¨¢n a cambio de la liberaci¨®n de rehenes estadounidenses en L¨ªbano. Jorasani admiti¨®, sin embargo, que su pa¨ªs se hab¨ªa abastecido de armas en el mercado norteamericano, aunque sin pasar por los canales oficiales.
Jorasani, en una conferencia de prensa celebrada en Nueva York ayer por la tarde (madrugada de hoy, hora peninsular espa?ola), reconoci¨® la existencia de contactos con EE UU, por intermedio de terceros pa¨ªses como Argelia y Jap¨®n, informa France Presse. El embajador desminti¨® que Ir¨¢n pudiera admitir suministros militares procedentes de Israel, as¨ª como una mediaci¨®n de ese pa¨ªs entre Teher¨¢n y Washington. Las declaraciones salen al paso de los interrogantes suscitados por el asunto en los medios pol¨ªticos y la Prensa de Estados Unidos.Dos rehenes norteamericanos
Seg¨²n el diario The New York Times, Ronald Reagan ha decidido continuar los contactos secretos con Ir¨¢n para lograr la liberaci¨®n de los dos rehenes norteamericanos que siguen en manos de un grupo proiran¨ª en L¨ªbano, seg¨²n afirmaron funcionarios de la Administraci¨®n de EE UU. El lunes, en una reuni¨®n con sus asesores, Reagan fue informado de que a¨²n hab¨ªa esperanzas de que Thomas Sutherland y Terry Anderson sean liberados en una semana o dos.
La Casa Blanca, seg¨²n estos funcionarios, est¨¢ convencida de que hay suficientes probabilidades de que estos dos rehenes sean liberados como para justificar la prosecuci¨®n del esfuerzo, pero expresaron sus dudas de que los actuales contactos puedan continuar de un modo productivo durante m¨¢s de una semana.
El diario norteamericano agrega que la decisi¨®n de mantener abiertos estos canales subraya un giro espectacular en la pol¨ªtica de la Casa Blanca, y coincide con cr¨ªticas en Estados Unidos y en el extranjero sobre el uso de canales clandestinos de comunicaci¨®n con Ir¨¢n y sobre la colaboraci¨®n con Israel para llevar equipo militar a Ir¨¢n a cambio de la liberaci¨®n, hasta ahora, de tres rehenes.
Las cr¨ªticas a la operaci¨®n de la Casa Blanca han producido extraordinarias divisiones en el seno de la propia Administraci¨®n. Los funcionarios de la Presidencia han expresado su consternaci¨®n ante el modo en que se ha llevado la pol¨ªtica secreta.
El Consejo de la Casa Blanca nunca fue consultado, y fue el Consejo de Seguridad Nacional el que llev¨® a cabo las negociaciones secretas con Ir¨¢n, seg¨²n funcionarios adscritos a la presidencia. En fecha reciente, el consejero Peter Wallison comenz¨® a investigar las cuestiones legales que rodean este caso, seg¨²n las mismas fuentes.
Hasta que la semana pasada fue revelada la pol¨ªtica secreta del presidente, EE UU se hab¨ªa opuesto p¨²blicamente a actividades susceptibles de ser consideradas como negociaciones con pa¨ªses relacionados con el terrorismo para conseguir la liberaci¨®n de los rehenes. El Departamento de Estado tiene oficialmente a Ir¨¢n en la lista de los pa¨ªses que apoyan el terror.
Por el momento, la Administraci¨®n no est¨¢ segura de que Sutherland y Anderson seda liberados. Un funcionario afirm¨® que la situaci¨®n interna en Ir¨¢n es preocupante, bas¨¢ndose en las informaciones que dan cuenta de la existencia de una lucha interna por el poder, en la que los contactos con Israel y EE UU est¨¢n siendo utilizados como munici¨®n por las facciones. La Administraci¨®n de Reagan se ha visto alentada por la liberaci¨®n, el martes, de dos rehenes franceses en L¨ªbano.
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