Albania recibe las cartas credenciales del primer embajador de Espa?a en Tirana
El jefe del Estado y del Partido Alban¨¦s del Trabajo, Ramiz Allia, recibi¨® ayer las cartas credenciales de Luis Cuervo, primer embajador espa?ol en Albania. Las relaciones diplom¨¢ticas se establecieron el d¨ªa 12 de septiembre. La ceremonia se prolong¨® durante hora y media de cordial intercambio de impresiones. Seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, las conversaciones rebasaron sorprendentemente el plazo de tiempo previsto por el sobrio protocolo alban¨¦s.
El agregado cultural, Agust¨ªn Casinello, que se llev¨® de Madrid un borrador de acuerdo cultural, acompa?¨® al embajador. Este acuerdo prever¨¢ el env¨ªo de personal docente a Tirana, el intercambio de becas de posgrado y un acuerdo entre las televisiones espa?ola y albanesa. Fuentes literarias albanesas opinaron que el escritor alban¨¦s Ismail Kadare, famoso en Francia y traducido al espa?ol, aceptar¨ªa una invitaci¨®n de editoriales espa?olas.El marco de este primer encuentro diplom¨¢tico de Tirana se vio reforzado por un acontecimiento deportivo hist¨®rico para los albaneses. Hoy jugar¨¢ la selecci¨®n nacional espa?ola de f¨²tbol con la albanesa.
En el centro de una apacible Tirana, ba?ada en un sol fresco del mar J¨®nico, los carteles de Gloria al Partido de los Trabajadores hicieron un hueco a los que anunciaban el partido de hoy. Como muestra de buena voluntad, los anfitriones har¨¢n todo lo posible para que el partido se retransmita en directo v¨ªa Grecia.
El consejero comercial, Jos¨¦ Luiz Sanz, ve futuro econ¨®mico si las empresas espa?olas se adaptan a lo que la Constituci¨®n albanesa prohibe, la aceptaci¨®n de cr¨¦ditos extranjeros. Es imposible construir plantas industria les en este pa¨ªs con cr¨¦ditos del Banco Exterior. Los albaneses insisten en pagar al contado, al final de las obras y el plazo de garant¨ªa. Otro imperativo alban¨¦s es que las plantas que Espa?a ofrezca no lleven tecnolog¨ªa de propiedad norteamericana ni sovi¨¦tica, por no tener el Estado leninista alban¨¦s ning¨²n tipo de relaci¨®n con el imperialismo norteamericano ni con el revisionismo sovi¨¦tico, seg¨²n las definiciones oficiales.
Lentitud
Los diplom¨¢ticos albaneses nunca entendieron la lentitud del proceso de establecimiento de relaciones con Espa?a, iniciado el a?o 1979. Hasta la muerte de Franco, los embajadores; albaneses ten¨ªan la orden de no darle la mano al de Espa?a en las recepciones de terceros pa¨ªses en las que coincidieran. La expulsi¨®n de Espa?a del pretendiente al trono alban¨¦s, Leka Zog, el a?o 1978, hizo desaparecer por parte de Tirana todos los impedimentos.En 1979, Madrid todav¨ªa ten¨ªa dudas acerca del apoyo que Albania pudiera seguir dispensando a grupos armados; marxistas-leninistas. Parece un hecho que el Frente Revolucionario Antifascista y Patri¨®tico (FRAP) cont¨® en sus tiempos con un refugio en Tirana. Madrid sospech¨® tambi¨¦n que los grapos, hab¨ªan heredado el favor alban¨¦s, hecho siempre desmentido por Albania.
Fuentes diplom¨¢ticas albanesas se?alaron que todo parec¨ªa hecho a primeros de 1981, cuando, de repente, la perspectiva de relaciones volvi¨® a crisparse por parte espa?ola.
Entre el 1 y el 4 de junio de 1984, Miguel ?ngel Moratinos, consejero de la embajada espa?ola en Belgrado, fue el primer diplom¨¢tico espa?ol que visit¨® Albania en 40 a?os. Volv¨ªa a agilizarse el proceso de acercamiento y el nuevo embajador, Jes¨²s Millaruelo, recib¨ªa permiso para asistir a las recepciones oficiales albanesas.
En julio de, 1984, los senadores socialistas Rafael Estrella y Antonio Ram¨ªs, fueron, acompa?ados por el embajador espa?ol, Juli¨¢n Ayesta, a la embajada albanesa en Belgrado. Exteriores calificar¨ªa la visita de "excesivamente osada".
Coincidiendo con la llegada de Luis Cuervo a la embajada de Belgrado, Madrid y Tirana emprendieron la recta final del reconocimiento. El 12 de septiembre establec¨ªan unas relaciones que culminaban ayer.
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