Antonio Gonz¨¢lez

Antonio Gonz¨¢lez Gonz¨¢lez, el profesor canario de 69 a?os que el pasado d¨ªa 22 recibi¨® de manos de don Felipe de Borb¨®n el Premio Pr¨ªncipe de Asturias de investigaci¨®n, se especializ¨® en qu¨ªmica org¨¢nica en el Reino Unido, en 1946, bajo la tutela del premio Nobel sir Alexander Todd. Antes de viajar a Tenerife en esa fecha para ocupar la c¨¢tedra de dicha rama en la universidad de La Laguna, se propuso repetir en su isla natal la experiencia cient¨ªfica de Cambridge. Como laboratorio se encontr¨® con una solitaria habitaci¨®n, un grifo y un hornillo de petr¨®leo; ni tan siquiera luz y gas.

Este canario universal naci¨® en una peque?a localidad de Tenerife, Realejo Alto, y sin propon¨¦rselo, ha conseguido casi todo en esta vida. Ha sido propuesto dos veces como candidato al Premio Nobel; figura entre las personalidades m¨¢s destacadas en la famosa publicaci¨®n anglosajona Who is Who (Qui¨¦n es Qui¨¦n); ocupa un sill¨®n en la Real Academia de Ciencias Exactas, F¨ªsicas y Naturales, y ha sido designado por la Unesco como asesor para sus planes de colaboraci¨®n interregional sobre qu¨ªmica de los productos naturales. Pero si algo traiciona su acentuada modestia es la pasi¨®n con que explica su ¨¦xito cient¨ªfico desde la periferia. "Cuando llegu¨¦ a Tenerife, la universidad no ten¨ªa ni aulas. Muchas clases se daban de pie alrededor de una mesa. El presupuesto de la facultad de Qu¨ªmicas era de 50.000 pesetas anuales y lo gast¨¢bamos en un mes. Los primeros aparatos electr¨®nicos los traje de contrabando desde Londres. Pero mi obsesi¨®n era demostrar que nuestra universidad no deb¨ªa servir s¨®lo como lugar de recuperaci¨®n despu¨¦s de las oposiciones para los catedr¨¢ticos for¨¢neos, sino como escenario de ambiciosos proyectos cient¨ªficos", se?ala.No sigui¨® los pasos de sus amigos Severo Ochoa y Grande Covi¨¢n, y prefiri¨® tozudamente permanecer en La Laguna a pesar de recibir ofertas como la de un ministro brasile?o que le encomend¨® la direcci¨®n de un moderno laboratorio en su pa¨ªs. El Instituto de Productos Naturales Org¨¢nicos (IPNO), en el que ha formado a 40 promociones de qu¨ªmicos espa?oles, latinoamericanos y africanos, supervisando unos 500 trabajos de investigaci¨®n y descubriendo sustancias naturales en productos marinos y bot¨¢nicos con acci¨®n anticancer¨ªgena y anticonceptiva, goza hoy de un alto prestigio internacional. Reconoce en el ex ministro franquista Manuel Lora Tamayo, a pesar de sus discrepancias ideol¨®gicas, a su profesor y padrino. Cuando dimiti¨®, en los a?os sesenta, como rector de la universidad de La Laguna estaba harto de ostentar el cargo a?adido de procurador en Cortes. Unas declaraciones suyas cr¨ªticas al r¨¦gimen pudieron costarle la c¨¢rcel. Su fama de rojo, que no hab¨ªa hecho mella en Lora Tamayo, tampoco arrug¨® a Villar Palas¨ª, que lo ratific¨® en el cargo y le impuso una cruz al m¨¦rito civil. En democracia, el Rey le design¨® senador real. Antonio Gonz¨¢lez, que ha desempe?ado un valioso papel mediador entre la qu¨ªmica org¨¢nica del Norte y el Sur, afirma con sencillez: "He cumplido con mi deber".