Fin de la tragedia
En EL PA?S, que tantas cosas nos dice y tantas cosas se guarda, el d¨ªa 1 de noviembre, en la p¨¢gina 14, refleja unas opiniones y alegr¨ªas de los grupos parlamentarios ante la disposici¨®n del Gobierno de resolver satisfactoriamente la incorporaci¨®n en sus puestos a los militares pertenecientes a la UMD. A este gesto yo me uno por ser de justicia.Pero hay unas declaraciones del diputado socialista se?or Busquets, antiguo componente de la UMD, en las que dice: es el fin definitivo no s¨®lo de este problema, sino de todos los derivados de la guerra civil y de la dictadura.
Supongo la gran emoci¨®n sentida por el se?or Busquets. No quiero suponer desconocimiento, pero este se?or sufre un gran error al pronunciar el fin de una gran tragedia.
Ante m¨ª tengo una sentencia dictada en consejo de guerra con el n¨²mero 143.365, celebrado en Oca?a (Toledo) el d¨ªa 10 de diciembre de 1948, en la que se condena a 25 a?os de reclusi¨®n, causa instruida por el coronel don Enrique Aymar Fernandes. Ante este hecho monstruoso pide el condenado la revisi¨®n del expediente, consiguientemente a la condena impuesta. El auditor del Ej¨¦rcito jam¨¢s contesta. Hace un a?o me dirig¨ª al Defensor del Pueblo. Seguramente no le interes¨®, por el tiempo pasado o por haber actuado juntos en los momentos dificiles de la represi¨®n franquista, como lo dernuestra la sentencia. Es f¨¢cil entrar en prisi¨®n, se?or Busquets, y cumplir 18 a?os, nueve meses y 12 d¨ªas recorriendo la casi totalidad de las prisiones espa?olas. Pero cuando se sale de ellas con 59 a?os, el estado f¨ªsico no es nada bueno, a pesar de una moral de lucha formidable para conseguir que el pueblo espa?ol recobre su libertad al llegar la democracia y el cambio, al mismo tiempo que el olvido. Quiz¨¢ esto carece de importancia cuando su ilusi¨®n est¨¢ consumada al ver a su partido triunfante, al ver el incremento de militantes que vienen a servirse y otros a servir una causa. Quiero creer que el se?or Busquets no sospecha nada malo de la mencionada causa, lo rnismo que sus compa?eros, al pedir en su d¨ªa la revisi¨®n de la causa. Yo no pido la amnist¨ªa porque ¨¦sta me la concedi¨® el anterior r¨¦gimen al cumplir las dos terceras partes de la condena que me fue impuesta de 25 a?os (18 a?os, nueve meses y 12 d¨ªas) para acogerme a la libertad condicional.
?Por qu¨¦ esa condena y tanto tiempo? ?Por ser solamente delegado nacional de propaganda y prensa del PSOE? ?Coordinador de la propaganda de UGT en Espa?a? ?Miembro de la comisi¨®n ejecutiva nacional del Equipo de Hombres sin Nombre? ?Secretar¨ªo general de la Federaci¨®n Nacional de las Juventudes Socialistas de Espa?a? ?Representante en la Conferencia, Internacional Socialista, celebrada en Par¨ªs en el mes de agosto bajo la presidencia de Le¨®n Blum? Todo esto est¨¢ reflejado en la sentencia 143.365, olvidada para muchos, pero no para otros.-
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