Las elecciones de hoy en la RFA se realizan bajo el signo de la continuidad en el poder
Las elecciones generales en la Rep¨²blica Federal de Alemania (RFA) se celebran hoy bajo el signo de la continuidad y con el partido gobernante democristiano, la Uni¨®n Cristiana Democr¨¢tica-Uni¨®n Social Cristiana (CDU-CSU), como claro favorito. En torno a los 45 millones de ciudadanos mayores de 18 a?os han sido convocados a las urnas para decidir la composici¨®n del nuevo Bundestag (Parlamento federal), que cuenta con 496 esca?os. Concluye as¨ª una larga campa?a electoral exenta de tensi¨®n e inter¨¦s al haber que, dado muy pronto descartadas las posibilidades de la oposici¨®n como alternativa real a la coalici¨®n de democristianos y liberales dirigida por el canciller federal, Helmut Kohl.
En los comicios de hoy concurre un total de 16 partidos, entre ellos varios grup¨²sculos de extrema derecha. No obstante, s¨®lo los cinco partidos ya presentes en el Parlamento (el cristiano dem¨®crata y su hom¨®logo b¨¢varo -el cristiano social-, liberal, socialdem¨®crata y verde) tienen posibilidad de superar el 5% de los votos necesario para volver al Bundestag.La CDU-CSU contaba en la legislatura que concluye con 244 esca?os; el Partido Social dem¨®crata Alem¨¢n (SPD), 193; los liberales (FDP), 34, y el Partido de los Verdes, 27 esca?os. El partido democristiano CDU y su hom¨®logo b¨¢varo CSU aparecen en los ¨²ltimos sondeos como claros vencedores, con un resultado previsto entre el 44% y el 48%.
Tras una legislatura en la que el desgaste de los democristia nos, y especialmente de su canciller, Kohl, parec¨ªa imparable, en el ¨²ltimo medio a?o el jefe del Gobierno se ha afianzado constantemente.
Retrato-'robot'
Esc¨¢ndalos como el del general G¨¹nther Kieesling -acusado infundadamente de constituir un riesgo para la seguridad por supuesta homosexualidad-, el caso Flick, la utilizaci¨®n partidista de los servicios de informaci¨®n, los sumarios contra el propio Kohl por supuesta financiaci¨®n ilegal y los continuos desatinos del canciller al analizar el pasado nacional socialista alem¨¢n han sido pr¨¢cticamente olvidados. Kohl se presenta como un canciller optimista y con gran seguridad en s¨ª mismo, poco brillante pero s¨®lido, mediocre pero eficaz, todo lo cual traduce el retrato robot del alem¨¢n medio.Con un mensaje populista de optimismo, en el marco de un auge econ¨®mico evidente que si bien est¨¢ concluyendo, muestra ahora sus claros efectos, Kohl ha sabido presentarse como el canciller de los vencedores, de los sectores sociales del ¨¦xito, relegando a Rau al papel de defensor de los perdedores, de los parados y, como dijo el canciller en su intervenci¨®n final en televisi¨®n el pasado jueves, de quienes "fomentan la envidia".
Utilizando con habilidad el estado de ¨¢nimo de la mayor¨ªa en contra de la inmigraci¨®n del Tercer Mundo y en favor de una reconstrucci¨®n de la identidad nacional alemana, Kohl es el beneficiario de la nueva autoconflanza germana.
Parejo a este reforzamiento de la posici¨®n de Kohl, tanto en su partido como fuera de ¨¦l, se ha producido el hundimiento de la alternativa socialdem¨®crata y de las posibilidades de su candidato a la canciller¨ªa, el jefe del Gobierno de Renania-Westfalia, Johannes Rau. ?ste, que a¨²n en la primavera pasada aventajaba claramente a Kohl en las preferencias del electorado, se vio muy debilitado por luchas internas de su partido, falta de apoyo por parte de la direcci¨®n, especialmente del presidente, Willy Brandt, y por esc¨¢ndalos que quebraron la credibilidad del SPD, como el caso de corrupci¨®n y malversaci¨®n en la inmobiliaria sindical Netie Heimat.
Candidato a quemar
Rau se present¨® rechazando de antemano toda alianza con los verdes. Esto hizo que desde el principio su objetivo de la mavor¨ªa absoluta careciera de cred¨ªbilidad. Adem¨¢s no evit¨® que la derecha utilizara la amenaza de la coalici¨®n rojo-verde", de supuestas consecuencias apocal¨ªpticas para la RFA, para evitar el voto centrista al SPD.Seg¨²n se ha desarrollado la campa?a, ha quedado en evidencia que, para Brandt, Rau s¨®lo ha sido un candidato a quemar pol¨ªticamente para dejar el partido sin oposici¨®n interna a una alianza con los verdes de cara al futuro. Rau se presenta a los comicios sabi¨¦ndose enga?ado por Brandt. Los liberales se presentan a las elecciones como ¨²nicos garantes para que la CDU-CSU no logre la mayor¨ªa absoluta. Los ataques de que ha sido objeto por parte de los sectores m¨¢s derechistas de los democristianos ha ayudado al FDP a perfilarse como el factor de moderaci¨®n en la actual coalici¨®n.
Quien desee una continuidad de la alianza de centro-derecha, pero tema un giro reaccionario en la pol¨ªtica exterior y veleidades autoritarias en el interior, debe votar al FDP, dice su mensaje electoral.
Los verdes, por su parte, que atravesaron una fase de gran debilidad en esta legislatura, acuden a las elecciones confirmados como partido parlamentario y con grandes posibilidades de ampliar sus esca?os.
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