Aumentan las protestas mineras contra el plan de futuro de Hunosa

Las cuencas mineras del Caudal y del Nal¨®n permanecieron ayer paralizadas como consecuencia de la huelga general de 24 horas convocada por CC OO contra el plan de futuro de Hunosa, elaborado por la direcci¨®n de la empresa y el Instituto Nacional de Industria. SOMA-UGT ha convocado para hoy una nueva huelga general en las zonas mineras por el mismo motivo. El paro en Hunosa es pr¨¢cticamente total desde el pasado mi¨¦rcoles.Todos los servicios p¨²blicos quedaron ayer suspendidos en los municipios mineros de la zona central de Asturias. Ciudades como Mieres y Langreo estuvieron paralizadas. Los transportes no funcionaron y permanecieron cerrados comercios, establecimientos hosteleros e incluso colegios.

Grupos de mineros protagonizaron cortes de circulaci¨®n en numerosas carreteras y los piquetes desalojaron empresas de la comarca. Se formaron barricadas y la polic¨ªa disolvi¨® en alg¨²n caso a los trabajadores que cortaban las v¨ªas de comunicaci¨®n m¨¢s importantes. Los ferrocarriles permanecieron tambi¨¦n paralizados. Grupos de mineros se concentraron por la ma?ana ante los ayuntamientos de Langreo y Mieres para que los funcionarios se sumaran a la huelga general. Por la tarde se celebr¨® en Oviedo una manifestaci¨®n a iniciativa de CC OO.

El SOMA-UGT ha convocado para hoy una nueva huelga general en las cuencas y una manifestaci¨®n en Oviedo a las seis de la tarde contra el plan de futuro de Hunosa. Por segundo d¨ªa consecutivo, el paro de 72 horas iniciado el mi¨¦rcoles, convocado separadamente por los dos sindicatos mayoritarios, afect¨® a la generalidad de los pozos.

En algunas explotaciones se produjo la actuaci¨®n de piquetes, seg¨²n la empresa, y las v¨ªas de acceso fueron interceptadas en algunos casos con barricadas. S¨®lo trabajadores pr¨®ximos a la jubilaci¨®n y personal de mantenimiento permanec¨ªan ayer en los centros de trabajo.

Por otra parte, la mesa negociadora del convenio y plan de futuro de Hunosa no volver¨¢ a reunirse, por decisi¨®n de la parte empresarial, hasta que no se normalice el clima laboral.