Detalles importantes dificultan la consecuci¨®n de un eventual acuerdo

La propuesta sovi¨¦tica sobre los misiles de alcance intermedio (INF) no resuelve a¨²n algunas cuestiones que han surgido en las negociaciones de Ginebra, como la definici¨®n de la zona asi¨¢tica de la URSS o la instalaci¨®n de parte de los cohetes norteamericanos en Alaska, seg¨²n opinan expertos de la OTAN, quienes creen que se necesitan al menos 10 meses de trabajos preparatorios antes de poder firmarse un acuerdo.La URSS insiste en definir su territorio oriental, donde podr¨ªan permanecer 100 cabezas de misiles SS-20, por el l¨ªmite occidental de los Urales, desde donde, argumenta EE UU, a¨²n podr¨ªan alcanzar blancos en territorio de la OTAN. EE UU propone el l¨ªmite del meridiano 80, a la altura de Siberia.

Mosc¨² no ha aceptado que EE UU pudiera desplegar las 100 cabezas que le corresponder¨ªan en Alaska, desde donde podr¨ªan alcanzar territorio sovi¨¦tico y ser as¨ª consideradas como armas estrat¨¦gicas.

Los misiles de m¨¢s corto alcance tambi¨¦n plantean problemas. Para los aliados atl¨¢nticos no basta retirarlos de la RDA o de Checoslovaquia, pues dada su movilidad podr¨ªan regresar r¨¢pidamente a sus actuales ubicaciones.

EE UU pide en este terreno, adem¨¢s, el derecho a igualar el despliegue sovi¨¦tico en Europa, algo que Mosc¨² no ha aceptado. Respecto a la verificaci¨®n de un eventual acuerdo, EE UU ha presentado propuestas que, seg¨²n fuentes atl¨¢nticas, requerir¨¢n largos debates.

La pasada semana, las superpotencias ten¨ªan redactados 10 art¨ªculos en el borrador de acuerdo sobre las INF que se estaba elaborando en Ginebra. Seg¨²n fuentes de la OTAN, se tardar¨ªan unos 10 meses en concluirlo.

Argucia

En septiembre de 1985, Richard Burt, ex secretario de Estado adjunto para Asuntos Europeos y actual embajador de EE UU en Bonn, declar¨® en la conferencia anual del Instituto Internacional de Estudios Estrat¨¦gicos, que se celebr¨® en Berl¨ªn Occidental, que su Gobierno nunca pens¨® sinceramente en no desplegar los euromisiles, por lo que la doble decisi¨®n fue s¨®lo un argucia de cara al p¨²blico.La doble decisi¨®n, adoptada por la Alianza el 12 de diciembre de 1979, implicaba que la OTAN se mostraba dispuesta a suspender o modificar el despliegue, que comenzar¨ªa en noviembre de 1983, si EE UU y la URSS llegaban a un acuerdo negociado. En noviembre de 1981, pocas semanas antes de que se abrieran las negociaciones de Ginebra, Ronald Reagan present¨® su opci¨®n cero, en la que ofrec¨ªa no desplegar los euromisiles en Europa si la URSS eliminaba todos los SS-20 que ten¨ªa instalados en su parte europea. Dicha propuesta no gust¨® a los aliados, por lo que Reagan la modific¨®. La resurrecci¨®n de la opci¨®n cero en la cumbre de Reikiavik sorprendi¨® y molest¨® a algunos socios atl¨¢nticos de Estados Unidos.