Boadella: "Soy un hombre conservador"

El director de escena o terror dos teatreiros, Albert Boadella, al frente del Teatro Estable del Pa¨ªs Valenciano, estrena ma?ana en Madrid su ¨²ltimo montaje, Visanteta de Favara, basado en el sainete escrito el pasado siglo por Bernat i Valdov¨ª, en el Centro Cultural de la Villa de Madrid y dentro de la programaci¨®n del VII Festival de Teatro de Madrid. El hecho coincide con la celebraci¨®n de los 25 a?os de existencia del grupo catal¨¢n Els Joglars, del que Albert Boadella siempre ha sido el director, y con el que se ha convertido en el hombre de teatro espa?ol m¨¢s pol¨¦mico y quiz¨¢ m¨¢s atractivo del panorama del espect¨¢culo en nuestro pa¨ªs. Boadella, a pesar del aura de rebelde inconformista que le persigue, se declara "un conservador".

"Nosotros", comenta Boadella, "somos una especie de compa?¨ªa de carlistas, pero no un carlismo entendido como defensor del un determinado sector mon¨¢rquico, sino entendido como gente con violencia irracional, que no le gusta obedecer, que le gusta el arraigo con la tierra, con unas ciertas tradiciones y un poco kamikazes en el sentido de que se lleva una idea hasta el final"."Soy un hombre conservador", comenta Boadella, "lo que ha ocurrido es que, precisamente por eso, mi oficio lo he representado profundamente, me he vinculado absolutamente con las ra¨ªces del teatro y lo he llevado hasta el final. El oficio de comediante no es de estetas de la corte, sino de gente desarraigada blasfema muchas veces, provocadora, basta".

Habla de la desviaci¨®n actual que sufre el teatro, que se ha con vertido en un oficio de copistas "No puedo evitar no sentirme muy colega de ellos. No voy mucho a ver espect¨¢culos porque e teatro que veo a mi alrededor no es mi oficio. Es otra profesi¨®n distinta que yo respeto much¨ªsimo, hecho por grandes profesionales, pero que no tiene nada que ver con mi oficio".

Reconoce que su figura pol¨¦mica se debe a que dice lo que le da la gana y a ese ni?o travieso que lleva dentro. "No tengo nada que perder, y todo el mundo dice mentiras por inter¨¦s". Para Boadella, el teatro es una prolongaci¨®n de los juegos de infancia, pero ante 2.000 personas. "Si no fuera as¨ª, aparecer¨ªa el sentido del rid¨ªculo, algo que no se puede tener en esta profesi¨®n, que si la analizas con una mirada pr¨¢ctica es totalmente rid¨ªcula".

T¨®picos

En su teatro es habitual que se transgredan todos los t¨®picos de nuestra sociedad: "Son fetiches que se convierten en un lenguaje com¨²n entre el espectador y nosotros. Son signos comunes muy importantes, aspectos sensoriales. Yo soy el primer interesado en que la sociedad monte fetiches y t¨®picos".En los ¨²ltimos tiempos, tanto en los espect¨¢culos como en los hapennings que han montado Els Joglars, aparece con asiduidad la figura de Jordi Pujol, presidente de la Generalitat de Catalu?a, representado por un cabezudo que reproduce fielmente el rostro de esta figura pol¨ªtica. Este hecho no es casual, ya que esa presencia de Pujol es la lucha que Boadella mantiene consigo mismo. "Pujol es lo peor de m¨ª mismo, representa el aspecto m¨¢s negativo de mi idiosincrasia catalana. Es el hombre que juega a dos cartas, la cosa peque?a y reducida, la botigueta, la falta absoluta de grandes horizontes en todo, en lo cultural y lo pol¨ªtico. Adem¨¢s es una magn¨ªfica figura teatral, porque la mediocridad es fant¨¢stica para el teatro".

El llamado sello Boadella es definido por el director de Els Joglars: "Mi teatro es profundamente catal¨¢n, aunque lo nieguen los propios catalanes. Es el pudor de la tragedia, y cuando ¨¦sta aparece es en clave de humor. ?ste es nuestro sello constante". Las relaciones entre Els Joglars y la ley son las siguientes: libertad provisional pendiente de juicio en Valencia, diligencias previas en el juzgado de Tafalla, pendientes de un juicio en Burgos, pendientes ?le unas diligencias previas en Jerez de la Frontera, y Albert Boadella a¨²n tiene en el Supremo una apelaci¨®n por una condena de seis meses y un d¨ªa por su fuga de la c¨¢rcel cuando fue apresado por el consejo de guerra que recay¨® sobre La Torna.

Visanteta de Favara, obra dirigida por Albert Boadella, es una recreaci¨®n del sainete del escritor valenciano Bernat i Valdov¨ª que el propio Boadella define como un espect¨¢culo de tribu: "S¨®lo lo puede comprender bien quien pertenece a esta tribu que es la valenciana. Es el espect¨¢culo con el que m¨¢s he disfrutado. Siento admiraci¨®n por el mundo mediterr¨¢neo y l¨²dico de los valencianos. Valencia es el para¨ªso perdido entre dos r¨ªos: el Ebro y el Segura".