Haza?as del 'joven' Colby

Algo tarde lleg¨® a la conclusi¨®n de que su estructura ¨®sea y sus m¨²sculos ya fl¨¢cidos mejor daban para la imagen patriarcal de un Colby vetusto que para el perfil en¨¦rgico del desfacedor de entuertos. Porque en la primera mitad de los setenta Charlton Heston se constitu¨ªa a¨²n en portavoz del Se?or salvando a su pueblo de las hordas egipcias. Terremoto y Aeropuerto 75 le ten¨ªan a ¨¦l, Cid cibern¨¦tico, como h¨¦roe absoluto de toda cat¨¢strofe, y ¨¦sa era la cat¨¢strofe para la verosimilitud de la ficci¨®n.P¨¢nico en el estadio, tambi¨¦n, aunque menos a¨¦reo, m¨¢s proporcionado, pertenece a esa escuela sin alumnos que hace una docena de a?os convenci¨® al mundo de la necesidad de acudir al cine para ver c¨®mo se sal¨ªa de madre la naturaleza, incluso, como en este caso, la naturaleza animal, provocando grandes accidentes y mucho pretendido suspense. En cabeza, siempre, un h¨¦roe de ra¨ªz hestoniana. Detr¨¢s, siguiendo una f¨®rmula que no puede proceder sino de los presupuestos holgados con que estos productos est¨¢n edificados, piedras estelares de diverso tonelaje con alguna guinda anciana coronando el pastel: aqu¨ª le toc¨® en suerte a Walter Pidgeon.

Por lo dem¨¢s, el edificio se sostiene seg¨²n los c¨¢lculos facultativos de los arquitectos de marras. El hormig¨®n impide so?ar, lamentable p¨¦rdida para algo tan necesitado de sue?os como es el cine. P¨¢nico en el estadio es s¨®lo la resoluci¨®n exacta de una ecuaci¨®n sin encanto; infinidad de actores con triviales problemas en sus vidas unidos por el destino en un partido que ha de ser sangriento por un psic¨®pata cualquiera. Para bien, ah¨ª est¨¢n Charlton Heston como h¨¦roe mayor, y John Cassavetes, excelente cineasta aqu¨ª metido a hombre de Harrelson, como subh¨¦roe. Subproducto de lujo.

P¨¢nico en el estadio se emite hoy por TVE- 1 a las 22.05.