El tratado ABM
En una serie de intervenciones ante el Senado, el senador Sam Nunn formul¨® una de las preguntas m¨¢s importantes acerca del control de armamentos: el Tratado de Misiles Antibal¨ªsticos de 1972, ?permite que Estados Unidos desarrolle y experimente un sistema de guerra de las galaxias con bases espaciales?La Administraci¨®n Reagan, dispuesta a llevar adelante la Iniciativa de Defensa Estrat¨¦gica, dice que s¨ª. La semana pasada Nunn dijo que no. Las pretensiones de la Administraci¨®n, adujo, se basaban en "una completa y total tergiversaci¨®n" de las partes claves del hist¨®rico tratado, sobre todo en lo que se refiere a su ratificaci¨®n por el Senado.
Desde que el tratado se firm¨® en 1972, la paz nuclear se bas¨® en la voluntad de las superpotencias de renunciar a las defensas estrat¨¦gicas a gran escala.
As¨ª, cuando se dio al tratado la condici¨®n de ley por 88 votos contra 2, el Senado sab¨ªa lo que estaba haciendo: ratificar una prohibici¨®n expl¨ªcita del desarrollo y experimentaci¨®n de los sofisticados misiles antibal¨ªsticos (ABM) con base espacial, justo el tipo de sistema de SDI (Iniciativa de Defensa Estrat¨¦gica) que la Administraci¨®n Reagan quiere desarrollar y experimentar en una amplia interpretaci¨®n del tratado. Nunn advirti¨® que si la Administraci¨®n persiste en su pol¨ªtica corre el riesgo de llegar a un "enfrentamiento constitucional" con el Senado y a un "punto muerto" en la financiaci¨®n de la SDI.
, 22 de marzo
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