Jim Wright:"EE UU est¨¢ comprometido con los ¨¦xitos de Europa"

"Estados Unidos es el primer interesado en el fortalecimiento de la Comunidad Europea (CE) y de la Alianza Atl¨¢ntica", asegura el congresista dem¨®crata Jim Wright, presidente (speaker) de la C¨¢mara de Representantes norteamericana. "No conozco cuestiones que nos separen, y s¨ª muchas que nos unen", afirma, con una cadencia en su voz que delata su procedencia tejana. Wright, de 65 a?os, constitucionalmente n¨²mero tres, despu¨¦s del presidente y del vicepresidente -que por su cargo ocupa tambi¨¦n la jefatura del Senadoha participado en Madrid en la reuni¨®n anual in terparlamentaria entre EE UU y Europa.

El parlamentario se trasladar¨¢ hoy a Mosc¨² al frente de una delegaci¨®n del Congreso, coincidiendo con la visita de George Shultz.

Pregunta. El Senado recomend¨® que Shultz no fuera a la URS S tras el esc¨¢ndalo provocado por el espionaje de la Embajada norteamericana en Mosc¨². ?Cree usted que la visita deb¨ªa haberse aplazado?

Respuesta. Por supuesto que no. Habr¨ªa sido rid¨ªculo suspend¨¦r un viaje importante por un rev¨¦s temporal. No hay nada nuevo en ello. Los. sovi¨¦ticos nos esp¨ªan desde hace 50 a?os.

P. Y ustedes a ellos...

R. Naturalmente. ?Que hay de nuevo entonces? Lo importante ahora es la posibilidad de alcanzar la paz.

P. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece la aceptaci¨®n por parte de Gorbachov de abrir negociaciones sobre misiles de corto alcance al margen de las relativas a la eliminaci¨®n de los euromisiles?

R. Estoy muy alentado con la ¨²ltima propuesta del l¨ªder sovi¨¦tico y tengo entendido que el presidente Reagan tambi¨¦n lo est¨¢. Respecto a la posibilidad de que se celebre una cumbre, mire, ninguno de los dos me ha pedido consejo. Pero si yo ftiera Reagan o Gorbachov, la celebrar¨ªa.

P. Usted ha participado en Madrid en el encuentro anual de las delegaciones del Congreso norteamericano y del Parlamento Europeo. El a?o pasado, en Washington, la reuni¨®n se celebr¨® en un clima de preguerra comercial por la ampliaci¨®n de la CE. ?Ha mejorado el clima?

R. Las relaciones con Europa nunca han sido malas. Son buenas y espero que sean incluso mejor en el futuro. No conozco cuestiones que nos dividan, y s¨ª muchas que nos unen.

P. Bueno, pero habr¨¢ algunas que le preocupen, ?no?

R. No tengo conocimiento de la existencia de cuestiones que representen actualmente problemas potenciales. En la reuni¨®n de Madrid he dicho que Estados Unidos est¨¢ comprometido con el desarrollo y los ¨¦xitos de las democracias europeas. Creemos que nuestro futuro est¨¢ interrelacionado de manera inextricable.

P. Oyendo sus palabras parece como si todo fuera maravilloso.

R. Usted parece creer que existen muchos problemas con Europa. Y no es as¨ª.

El temido proteccionismo

P. E n Europa hay cada vez m¨¢s temor de que la Administraci¨®n de Reagan acent¨²e las medidas proteccionistas presionado por el Congreso debido al continuo deterioro del d¨¦ficit comercial. ?Aprobar¨¢ este a?o el Congreso el proyecto de ley de Comercio?

R. Sin duda.

P. Y ?c¨®mo va a ser esta ley?

R. No va ser una ley que suprima las importaciones, sino que permita fomentar nuestras exportaciones. No intentamos denigrar los productos extranjeros. Ahora bien, queremos decirles a nuestros amigos europeos que trataremos sus productos de la misma forma que ellos traten los nuestros. No hay proteccionismo en ello. Es simplemente reciprocidad.

P. Algunos pol¨ªticos europeos desear¨ªan crear una pol¨ªtica'de defensa europea aut¨®noma.?Qu¨¦ opina?

R. En mis contactos con l¨ªderes europeos no he o¨ªdo jam¨¢s eso. De todos modos, si as¨ª lo quieren, de acuerdo, que lo hagan; pero entonces Europa ten dr¨¢ que asumir la responsabilidad financiera de mantener las bases de la OTAN. A buen seguro que el Congreso norteameri cano se sentir¨¢ muy contento con toda iniciativa que suponga un alivio para nuestro fuerte d¨¦ficit fiscal. Sin embargo, le quiero hacer notar que mis palabras no significan que est¨¦ de acuerdo con la reducci¨®n de la presencia militar norteamericana en Europa.

P.?Cree usted que Reagan est¨¢ herido de muerte tras el esc¨¢ndalo del Irangate?

R. No creo que nadie desee que este problema derrote la capacidad pol¨ªtica de la actual Administraci¨®n. No queremos una presidencia debilitada, pero tampoco una presidencia imperial Fue un error enviar armas a Ir¨¢n.

P. ?Cu¨¢l es la lecci¨®n del Irangate?

R. Mire, todo fue posible porque Reagan fue mal aconsejado. Creo que la principal lecci¨®n del caso es que el presidente no cumpli¨® con su deber de informar al Congreso. Si lo hubiera hecho nos habr¨ªamos ahorrado toda esta verg¨¹enza. La ley est¨¢ para cumplirla, y eso incluye tambi¨¦n al Consejo de Seguridad Nacional y a la Agencia Central de Inteligencia (CIA).

P. ?Considera que ha fracasado la pol¨ªtica centroamericana de la Administraci¨®n de. Reagan?

R. La pol¨ªtica con Nicaragua no ha logrado el resultado que se buscaba, pero creo que la que se ha seguido en El Salvador, Honduras, Costa Rica y Guatemala ha tenido ¨¦xito. La democracia fl¨®rece en esos pa¨ªses.

P.?Tiene alguna posibilidad Reagan de que el Congreso apruebe este a?o su petici¨®n de 100 nuevos millones de d¨®lares de ayuda a la contra?

R. Lo dudo bastante, a menos que sucedan ¨ªmprevistos o que Daniel Ortega cometa alguna tonter¨ªa.

P.?Va a ser 1988 el a?o en el que el los dem¨®cratas reconquisten la Casa Blanca. ?Piensa que Gary Hart lograr¨¢ la nominaci¨®n del partido?

R. Esperamos que s¨ª, pero no hay que confiarse demasiado. No hay todav¨ªa un candidato claro.