Habitantes de cuevas en Fuentidue?a se trasladan a viviendas con energ¨ªa solar
Las 16 viviendas de promoci¨®n p¨²blica que Joaqu¨ªn Leguina, presidente de la Comunidad, entreg¨® oficialmente, a mediados del mes de marzo, en Fuentidue?a de Tajo podr¨¢n ser habitadas efectivamente desde hoy, una vez que se hayan firmado los contratos con los adjudicatarios. De ellas, siete lo han sido a familias que han vivido, hasta ahora, en cuevas. Las nuevas casas se abastecer¨¢n de energ¨ªa solar.
Algunos de estos adjudicatarios no entienden muy bien los motivos del retraso en la entrega, y las explicaciones ofrecidas por los distintos organismos son dispares y hacen pensar en la campa?a electoral. En el Ivima, organismo promotor de las viviendas, esperaban a que el alcalde de la localidad se pusiera de acuerdo con los vecinos para firmar el contrato de venta o arrendamiento.Pedro Antonio Mora, m¨¢ximo representante de la corporaci¨®n municipal, culpa del retraso a los problemas surgidos a causa de un cable de la luz, precisamente el que tiene que repartir energ¨ªa a estas casas, que deb¨ªa pasar forzosamente por una finca cuyo propietario no estaba de acuerdo.
Ahora, seg¨²n Pedro Antonio Mora, han desaparecido todos los problemas. S¨®lo falta firmar los contratos, para lo cual se desplazar¨¢n hoy a Fuentidue?a de Tajo los responsables del Ivima, haciendo entrega efectiva de las viviendas a sus nuevos propietarios al menos 35 d¨ªas despu¨¦s de la inauguraci¨®n oficial.
Las viviendas forman parte de un total de 60 financiadas ¨ªntegramente por la Comunidad de Madrid. La primera fase compuesta por 25 unidades, ha supuesto una inversi¨®n de 84 millones de pesetas. Las nuevas casas son de tipo unifamiliar y est¨¢n adosadas, se encuentran distribuidas en dos calles que conforman la colonia Enrique Tierno y cuentan con placas solares que suministrar¨¢n agua caliente y calefacci¨®n.
Entre los adjudicatarios, las personas de menos disponibilidad econ¨®mica de la poblaci¨®n, s¨®lo siete familias habitan en las c¨¦lebres cuevas de Fuentidue?a. La explicaci¨®n a esta circunstancia se encuentra en que algunos de los due?os de estas cuevas tienen casa propia y otros utilizan esta seudovivienda como segunda residencia. Tambi¨¦n hay un grupo de personas mayores, de ingresos econ¨®micos reducidos, que se muestran remisas a cambiar su hogar de toda la vida por otro, aunque sea m¨¢s habitable.
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