"El futuro europeo depende del desarrollo del pacifismo"
A este hombr¨®n t¨ªmido que se ha forjado una estructura a caballo entre la pol¨ªtica y la literatura en los 10 a?os que lleva fuera de la c¨¢rcel y que ahora maquina una tesis doctoral sobre el rey Arturo, el esca?o en Europa, en un Parlamento con escasa capacidad legislativa y amplia vocaci¨®n cultural, le va que ni pintado.Mario Onaind¨ªa, de 39 a?os, casado, con un hijo en puertas, cinco novelas en el mercado (dos de ellas traducidas al castellano) y otra a punto de salir a la calle, que este curso termina Filolog¨ªa Inglesa y que se ha embarcado en estudios filos¨®ficos, encabeza la coalici¨®n Izquierda de los Pueblos, una tercera v¨ªa que aspira a facilitar el trasvase de ideas para revitalizar la izquierda en Espa?a y a poner una pica m¨¢s en la lucha por el pacifismo.
Rodeado de libros, Onaind¨ªa, vitoriano de adopci¨®n, atr¨¢s quedaron los negros nubarrones de la pena de muerte en el proceso de Burgos, prepara el asalto al esca?o con la ilusi¨®n de que Estrasburgo sirva de plataforma de lucha contra la Europa de los Estados. "La idea es que la unificaci¨®n europea no represente un fortalecimiento de los Estados, y signifique m¨¢s bien que en el Parlamento Europeo haya otro frente de lucha contra el Estado centralista".
La nueva izquierda
El renacimiento de la izquierda. ?sa es una de las claves de la coalici¨®n. "Se echa de menos en la izquierda del Estado espa?ol cualquier debate desde 1982. El PSOE hace cosas que la derecha defiende en el resto de Europa. Cuando en Francia se hablaba de nacionalizaci¨®n, la izquierda europea la defend¨ªa y la derecha quer¨ªa la privatizaci¨®n. Esa semana se vendi¨® Seat".
Onaind¨ªa suspira por una izquierda diferente, que no dogmatice ni centralice, que crea de verdad que la variedad y la divergencia son un verdadero valor. Los viejos partidos no sirven, dice el l¨ªder de Euskadiko Ezkerra (EE), que tal vez porque no ha ganado unas elecciones ni se ha ido a casa ha alimentado esa llama de la renovaci¨®n de la izquierda. Se trata de que dentro de la variedad haya un hueco para la cuesti¨®n nacional y que la izquierda espa?ola, que para Onaind¨ªa s¨®lo se ha apoyado en el sindicalismo y en ganar elecciones, busque nuevas bases. Este vasco que confla en llevar a Europa la voz de seis formaciones pol¨ªticas asegura que este intento de renovar desde las nacionalidades la izquierda no condena a la coalici¨®n a obtener solo votos perif¨¦ricos. "Es el momento de comprobar", a?ade, la sinceridad de esos ciudadanos de Madrid o Sevilla que en pasadas elecciones nos preguntaban por qu¨¦ EE no se presentaba.
Or¨ªaind¨ªa no llegar¨¢ a Estrasburgo como un Robinson cualquiera. Cuenta con la experiencia de Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, que hasta ahora ha estado en Europa, en esa Europa que ha visto el enfrentamiento del grupo Arco Iris, en el que se integrar¨¢ EE, con Herri Batasuna (HB) por el problema de la violencia. La pol¨¦mica, para Onaind¨ªa, surgi¨® al margen de ambas fuerzas abertzales y fue producto del inter¨¦s de los representantes del subgrupo GRAEL por escuchar las opiniones de HB. "Estuve despu¨¦s en Bruselas y no se les hab¨ªa quitado la carne de gallina" por lajustificaci¨®n del asesinato de Yoyes.
Y al fondo, el pacifismo. Onaind¨ªa, que no ha hecho la mil?, opina que el pacifismo es a la vez estrategia y valor ideol¨®gico. "El futuro de Europa depende de su capacidad para desarrollar el movimiento pacifista. Cuanto m¨¢s tensi¨®n hay entre los bloques, menor es el papel de Europa. S¨®lo a trav¨¦s del pacifismo se puede conseguir que Europa tenga menor dependencia de los bloques y vaya desarroll¨¢ndose la unidad europea".
"En Euskadi, siempre hemos tenido claro que el futuro de la izquierda de Euskadi, que es tanto como decir el futuro de Euskadi, depender¨¢ de c¨®mo solucionemos el problema de la violencia pol¨ªtica. Si en Euskadi se consigue resolverla, no a trav¨¦s de la represi¨®n, sino porque ha habido un debate pol¨ªtico en la izquierda, ¨¦sta est¨¢ claro que al d¨ªa siguiente gana las elecciones.
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