Los gatos de lidia
Domecq / Bernad¨®, Espartaco, Mendes
Cinco toros de Juan Pedro Domecq: pobres de presencia y blandos; 3?, sobrero de Sep¨²lveda: bien presentado y manso. Joaqu¨ªn Bernad¨®: oreja y vuelta. Espartaco: oreja y vuelta. V¨ªctor Mendes: vuelta y palmas.
Plaza Monumental de Barcelona. 14 de junio.
Al ganadero Juan Pedro Domecq le pidieron toros para Barcelona se trajo gatos. Felinos de poca monta de cuantos menudean al olor de las sardinas que, en tardes de barbacoa, degustan por los cortijos.Sal¨ªa el primer Juanpedro y la afici¨®n verdadera de la Monumental resoplaba trompetillas por el tendido: "Que si es gato, que si conejo; no llega a babosa. Al peto que ni entre...". Y en efecto, no entraba m¨¢s que al picotazo. Al instante las asistencias reclamaban ox¨ªgeno a los de protecci¨®n civil y tras aplicar mascarilla, permit¨ªan a las babosas de Juan Pedro un ratito m¨¢s en pie. Al tercero le echaron al corral porque adem¨¢s de esmirriado le temblaba la patuca. Sal¨ªa el sobrero de Sep¨²lveda que era manso pero tambi¨¦n toro, con trap¨ªo, corniveleto y de embestida calamocheante. Mendes se faj¨® en derechazos. Aguant¨®, pis¨® su terreno, no hizo concesiones a la galer¨ªa y tore¨® al ¨²nico toro que se vi¨® en la tarde.
La afici¨®n segu¨ªa soltando improperios a medida que sal¨ªan los gatos por chiqueros. Sin dar importancia a Joaqu¨ªn Bernad¨® hicieron, sin embargo, caso y mucho cuando el diestro catal¨¢n toreaba suave al natural. Pases de frente en ambas versiones llevaban la calidad impl¨ªcita del buen toreo.
Los aficionados reprochaban a la figura del momento la falta de toros ante s¨ª, su vulgaridad en el manejo de la muleta, ese sacarse para afuera a los toros tras el muletazo y los trapazos airosos que anteceden al desplante y rodillazo. Ramalazos de Ojeda, ligazones de D¨¢maso, desplantes del Platanito, vienen a ser el toreo que ayer hizo Espartaco.
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