Noriega elogia la actitud de EE UU durante la crisis que sacude a Panam¨¢

El hombre fuerte de Panam¨¢, el general Manuel Antonio Noriega, ha elogiado la actitud del Gobierno de Estados Unidos y de su embajador en Panam¨¢ durante la crisis que sacudi¨® a este pa¨ªs la semana pasada. Ayer, la convocatoria de huelga general indefinida hecha por la oposici¨®n no encontr¨® apenas eco y la situaci¨®n parec¨ªa entrar en v¨ªas de soluci¨®n. El general Noriega declar¨® el domingo en la provincia de Chiriqui, en la frontera con Costa Rica, que el comportamiento del embajador de EE UU, Arthur Davis, hab¨ªa sido el de "un gran ciudadano de su pa¨ªs" y que, en todo momento, hab¨ªa actuado "con mesura y con tacto".

Durante la semana pasada Davis se reuni¨® en varias ocasiones con dirigentes de la oposici¨®n para tratar sobre el clima de inestabilidad que ha vivido el pa¨ªs tras las declaraciones del antiguo jefe de Estado Mayor, coronel Roberto D¨ªaz Herrera. En un gesto p¨²blico que fue interpretado como de apoyo a la oposici¨®n, el embajador visit¨® el mi¨¦rcoles al presidente del Partido Dem¨®cratacristiano, Ricardo Arias Calder¨®n.El general Noriega afirm¨® en Chiriqui que el apoyo recibido por la oposici¨®n es de parte de sectores conservadores de Estados Unidos, pero no del propio Gobierno norteamericano. En d¨ªas anteriores, el jefe de las Fuerzas de Defensa paname?as hab¨ªa denunciado que ciertos grupos de Estados Unidos estaban interesados en crear un clima de inestabilidad en Panam¨¢ para impedir la devoluci¨®n del Canal en el a?o 2000, tal como preven los tratados Torrijos-Carter.

Portavoces de la oposici¨®n han reconocido en privado que "Estados Unidos nunca ha dejado del todo de apostar por el caballo de Noriega" y que "s¨®lo una fuerte movilizaci¨®n podr¨ªa hacerles cambiar de criterio". En este sentido, pueden resultar esclarecedoras las declaraciones hechas en Costa Rica por el empresario paname?o y antiguo embajador en Washington Gabriel Lewis Galindo, que se proclam¨® en San Jos¨¦, portavoz del movimiento opositor paname?o en el exilio. Lewis, uno de los art¨ªfices de los tratados sobre el canal y considerado como un hombre de Washington, manifest¨®: "No necesitamos de Estados Unidos para triunfar".

Fuentes diplom¨¢ticas occidentales aseguran que "en realidad, Estados Unidos ha mantenido una estricta neutralidad en esta crisis, en el sentido de que hasta ahora no ha dado lo que podr¨ªa ser el empuj¨®n definitivo por ninguno de los dos bandos".

El Gobierno paname?o viene manteniendo desde hace un a?o que Estados Unidos intenta la sustituci¨®n del general Manuel Antonio Noriega por otro militar m¨¢s moldeable, aunque la embajada norteamericana en la capital paname?a niega que haya tenido en alg¨²n momento diferencias graves de criterio con los militares paname?os.

Apoyo a Contadora

El apoyo de Noriega al Grupo de Contadora, sus buenas relaciones con Cuba y Nicaragua y, en general, una pol¨ªtica exterior desmarcada de Estados Unidos, se han mencionado siempre como motivos para que los norteamericanos abandonen a Noriega.

Fuentes pr¨®ximas a la representaci¨®n norteamericana en Panam¨¢ creen que, mientras el Departamento de Estado considera que la pol¨ªtica exterior de Noriega y su propia imagen perjudican los intereses de Estados Unidos, el Pent¨¢gono valora que las Fuerzas Armadas paname?as siempre han colaborado con las norteamericanas en las tareas de defensa del Canal. El pasado mes de febrero, 12.000 soldados norteamericanos y par¨ªame?os participaron en unas maniobras conjuntas en la frontera con Costa Rica denominadas Kindle Liberty 1987 y destinadas a la preparaci¨®n para combatir un eventual ataque guerrillero contra el paso interoce¨¢nico.

Dirigentes dem¨®cratacristianos, los m¨¢s activos de la oposici¨®n, se esfuerzan por presentar estos d¨ªas lo que podr¨ªa ser la alternativa de Gobierno aceptable para Estados Unidos con el fin de forzarle a retirar su apoyo a Noriega. La Democracia Cristiana, seg¨²n sus propios portavoces, est¨¢ en condiciones de ofrecer una junta de Gobierno provisional que conduzca al pa¨ªs "a una situaci¨®n a la costarricense", en la que una democracia sin participaci¨®n militar garantice la presencia de Estados Unidos en la zona.

Ayer, por primera vez desde hace ocho d¨ªas, la ciudad de Panam¨¢ vivi¨® hasta la hora de cerrar esta edici¨®n una jornada de casi absoluta calma. Los bancos y la mayor parte de los comercios volvieron a abrir sus puertas y el tr¨¢fico de autobuses y de otros veh¨ªculos fue pr¨¢cticamente normal.

La oposici¨®n afirma que se trata s¨®lo de una jornada de transici¨®n destinada a que los empleados puedan cobrar sus salarios, pero asegura que, a partir de hoy, se iniciar¨¢ el asalto final contra Noriega. En la noche del domingo se reprodujeron los incidentes en las calles de forma m¨¢s aislada.