Conducir con pastillas

Tomar un simple antihistam¨ªnico para combatir un resfriado poco antes de iniciar un viaje puede producir somnolencia, restar nuestra capacidad de concentraci¨®n y disminur los reflejos... Un analg¨¦sico para aminorar el dolor de cabeza puede hacer que el conductor sufra una molesta sensaci¨®n de v¨¦rtigo, sienta zumbido de o¨ªdos, pierda agudeza visual y pase de un estado de euforia a otro de disforia... Ingerir cualquier tranquilizante podr¨ªa provocar fatiga muscular, visi¨®n borrosa o sue?o.Todos estos efectos se dejan sentir de manera m¨¢s acusada cuando los medicamentos se han combinado con alcohol. Una copa de copa o un par de cervezas potencian la acci¨®n de un ansiol¨ªtico com¨²n, multiplic¨¢ndose sus efectos y produciendo reacciones imprevisibles, que pueden ser tr¨¢gicas.

"Se trata de valorar adecuadamente el factor beneficio-riesgo", dice el catedr¨¢tico Pedro Lorenzo, director del departamento de Farmacolog¨ªa de la facultad de Medicina de la universidad Complutense.

"No compensa aliviar nuestro constipado si para ello hemos ingerido unos antihistam¨ªnicos que puedan provocarnos sue?o o hacernos perder la capacidad de concentraci¨®n necesaria para conducir con precauci¨®n", a?ade el mismo profesor.

No s¨®lo adquirimos en las farmacias los productos que pueden llegar a alterar nuestra capacidad de conducci¨®n. La cafe¨ªna, que es la droga de mayor consumo en el mundo y cada vez se encuentra m¨¢s presente en bebidas y alimentos, produce tambi¨¦n modificaciones en nuestros comportamientos, especialmente en aquellos individuos con trastornos previos de la personalidad.

El doctor Miguel Navarro Garc¨ªa, profesor de Psicobiolog¨ªa en la facultad de Psicolog¨ªa de la universidad Complutense, cree que, dentro de unas dosis controladas, la cafe¨ªna "pone de manifiesto una mejor¨ªa franca de la vigilancia e incrementa notablemente la actividad perceptiva y oculomotora visual".

El profesor Navarro Garc¨ªa, que acaba de terminar un estudio para la Fundaci¨®n Mapfre sobre los efectos comportamentales de la cafe¨ªna en la conducci¨®n, considera, no obstante, que esta droga "puede ocasionar verdaderas distorsiones perceptivas y emocionales, debido a que aumenta el nerviosismo y la ansiedad".

Efectos del caf¨¦

Otros especialistas opinan que el caf¨¦ y las colas provocan un peligroso efecto rebote, que hace que el conductor pase de un estado de excitaci¨®n a otro de somnolencia y decaimiento.

La mujer est¨¢ sometida m¨¢s que el hombre a los riesgos de una medicaci¨®n adversa a la conducci¨®n. Los f¨¢rmacos analg¨¦sicos y antiespasm¨®dicos que frecuentemente utiliza durante los d¨ªas de su regla pueden disminuir sus reflejos y su capacidad de atenci¨®n.

Es tambi¨¦n muy elevado el n¨²mero de mujeres a las que el consumo de anticonceptivos provoca nerviosismo, irritaci¨®n y depresiones, estados todos ellos que disminuyen la concentraci¨®n.

En Espa?a, las aptitudes psicof¨ªsicas que deben poseer los conductores de veh¨ªculos para obtener el carn¨¦ de conducir est¨¢n reguladas en el Real Decreto 2.272/85, de 9 de diciembre.

En ese texto se hace referencia a las enfermedades y deficiencias que impiden conducir, pero no se aborda en ¨¦l la repercusi¨®n de los medicamentos. Para el catedr¨¢tico Pedro Lorenzo, "es una normativa imprecisa y con lagunas, pues en ella s¨®lo se menciona a los medicamentos en el caso de los diab¨¦ticos insulinodependientes".

El jefe de la unidad de asistencia sanitaria del Ministerio de Sanidad y Consumo, V¨ªctor Conde, afirma que el decreto, que s¨®lo tiene un a?o, no va a experimentar, de momento, ning¨²n tipo de modificaciones.

El doctor Conde particip¨® recientemente en unas jornadas celebradas en Madrid sobre la repercusi¨®n del alcohol y las drogas en los accidentes de tr¨¢fico. En esas jornadas se lleg¨® a pedir que el m¨¦dico, antes de recetar cualquier f¨¢rmaco, pregunte a su paciente si ¨¦ste se dispone a emprender alg¨²n viaje por carretera.

"Resulta dif¨ªcil llegar a esta situaci¨®n", opina V¨ªctor Conde, "debido a que objetivar los tratamientos medicamentosos no es sencillo, teniendo en cuenta adem¨¢s que en su mayor¨ªa son temporales".

Repercusiones

Fuentes de Farmaindustria, la patronal que agrupa a las industrias del sector, se?alan, por otra parte, que ya existe una normativa legal muy desarrollada (Orden Ministerial del 15 de julio de 1982 y Resoluci¨®n de la Direcci¨®n General de Farmacia del 19 de noviembre de 1982), en la que se obliga a los fabricantes a incluir en los prospectos de sus medicamentos la advertencia sobre cualquier repercusi¨®n negativa que pueda tener un producto.

Para algunos, el Reino Unido es, en este sentido, el modelo a seguir. La legislaci¨®n brit¨¢nica no s¨®lo detalla los aspectos negativos de los medicamentos en la conducci¨®n, sino que precisa que conducir bajo sus efectos constituye un delito.

Desde 1972, esta pr¨¢ctica implica una sanci¨®n autom¨¢tica de inhabilitaci¨®n durante seis meses. En Espa?a, por el contrario, todav¨ªa se alega como atenuante lo que en el Reino Unido es un agravante. Seg¨²n un estudio realizado en 1981 por el doctor Raffle 4% de los accidentes de tr¨¢fico ocurridos ese a?o en el Reino Unido ten¨ªan su origen en los efectos causados por la medicaci¨®n.