Diada de Catalu?a

Ante la proximidad de la Festa Nacional de Catalunya se me ocurre que algunas personas pueden tildar de inconsecuentes a los catalanes por tener como d¨ªa festivo el 11 de septiembre, aniversario de la rendici¨®n de Barcelona a las tropas de Berwick, escoc¨¦s al servicio de Luis XIV de Francia, puesto por ¨¦ste a disposici¨®n de su nieto Felipe V de Espa?a (Felipe VI para los catalanes; ¨¦stos no tuvieron como rey a Felipe el Hermoso, -el primer Felipe de Castilla-, por lo que para los catalanes siempre ha habido diferencia en la correlaci¨®n de n¨²meros). Pr¨¢cticamente, la rendici¨®n de Barcelona se?al¨® el fin de la Guerra de Sucesi¨®n, y al propio tiempo el de los derechos de Catalu?a.El pasado a?o, ya alg¨²n partido pol¨ªtico declar¨® la Diada como fiesta de regocijo y no de reivindicaci¨®n. Y los catalanes pensamos que s¨ª es jornada de reivindicaci¨®n puede y debe admitirse la fecha como jornada festiva; pero si es de car¨¢cter meramente folcl¨®rico, no vemos que la fecha de una derrota deba celebrarse. Una derrota se puede conmemorar, pero no celebrar; puede ser se?alada como jornada de meditaci¨®n para los catalanes, pero no festejarla.

Podr¨ªa hacerse as¨ª (la celebraci¨®n), si se hubiera vuelto al grado de libertad de que los catalanes gozaban; pero en una ¨¦poca de mezquindades pol¨ªticas, cuando hay que mendigar los derechos -escasos- de Catalu?a al Gobierno central; cuando el reconocimiento de una deuda por parte del Gobierno se considera en Catalu?a como un ¨¦xito pol¨ªtico, mientras que por otra parte la llamada regi¨®n catalana es una de las primeras de la CE, a muchos nos parece como si Catalu?a fuera una mula que , unida al carro de Espa?a, la arrastra adelante -casi a su pesar-, a cambio de los correspondientes latigazos.

Un amigo me dijo un d¨ªa que si el 12 de septiembre de 1714, al entrar las tropas de Berwick en Barcelona hubieran hallado una ciudad paralizada por una huelga general en vez de todo el personal al tajo, quiz¨¢ Felipe V de Espa?a (IV de Catalu?a) no habr¨ªa firmado el Decreto de Nueva Planta. Quiz¨¢ no tendr¨ªamos que conmemorar el 11 de septiembre. Y desde luego nunca celebrarlo, como nos aconsejan algunos partidos pol¨ªticos.-