'El Zapatones'

Vicente Calder¨®n, el fallecido presidente del Atl¨¦tico, le dijo un d¨ªa de 1986: "A veces, en la vida, es mejor ser cabeza de rat¨®n que cola de le¨®n". Estaba entonces en juego el futuro de Luis Aragon¨¦s Su¨¢rez, de 49 a?os, El Zapatones de Hortaleza -le llaman as¨ª por su particular forma de caminar-. Y eran momentos de tensi¨®n porque Luis segu¨ªa casado con su club de siempre (22 a?os en el Atl¨¦tico; 12 temporadas como jugador, en las que gan¨® tres veces la Liga, dos la Copa, una el Pichichi y otra un subcampeonato de Europa, y tres etapas en el banquillo, donde alcanz¨® en una ocasi¨®n la Copa Intercontinental, en otra la Liga y en dos la Copa), pero flirteaba con el Real Madrid de Ram¨®n Mendoza.La aventura del Madrid le pod¨ªa resultar ventajosa: 150 millones por tres a?os. Mendoza, Luis y las circunstancias hicieron finalmente buena la sentencia de Calder¨®n. Y es que fue imposible de sostener la presi¨®n de estar todo un a?o dirigiendo al Atl¨¦tico con la vista puesta en dirigir a su peor adversario. As¨ª que Luis sigui¨® a orillas del Manzanares tras pasar malos momentos.

Fue una fase de gran tensi¨®n para Luis, aunque quiz¨¢ no tan grande como la que sufri¨® con su ¨²ltima depresi¨®n, que le llev¨®, en un alarde de honestidad, a renunciar en agosto de 1986 a un contrato de 105 millones por tres a?os m¨¢s como rojiblanco. Y es que Luis padeci¨® lo que, en t¨¦rminos m¨¦dicos, se llama ciclotom¨ªa, es decir, alteraciones peri¨®dicas del humor. Hab¨ªa tenido tres hasta entonces, aunque de la ¨²ltima, la m¨¢s fuerte, se recuper¨® apenas en un mes.

"Se me vino el mundo encima, Luis ten¨ªa los ojos en el cogote. Se fum¨® un paquete entero en una hora". As¨ª le vio Calder¨®n en la reuni¨®n en la que se acord¨® la marcha del t¨¦cnico para curarse. Una ausencia que no pod¨ªa ser muy larga una vez que Luis estuviera recuperado. Contra la sombra del ausente se estrellaron Vicente Miera y Jes¨²s Mart¨ªnez Jayo, si bien aqu¨¦l sali¨® con 18 millones debajo del brazo por tres meses de trabajo y Jayo duplic¨® su ficha de cuatro a ocho millones.

Entrentamiento con Gil

Con la llegada de Jes¨²s Gil a la presidencia iba a cerrarse el largo ciclo de 22 a?os en rojo y blanco de Luis. Porque Luis hab¨ªa regresado a mitad de temporada y, como siempre, avalando la tesis de quienes sostienen que s¨®lo ¨¦l es capaz de dirigir al Atl¨¦tico. Y lo cierto es que, una vez m¨¢s, Luis estuvo a punto de ganar un t¨ªtulo y con una plantilla en la que nadie confiaba. La Real Sociedad y los penaltis se interpusieron en la final de la Copa 24 horas despu¨¦s de que Gil hubiese arrollado en las elecciones y unos d¨ªas antes de que ambos casi llegasen a las manos tras una agria discusi¨®n que amenaz¨® con llegar a los tribunales.Luis, tras su retorno, hab¨ªa firmado como entrenador hasta final de temporada, pero tambi¨¦n un contrato laboral de car¨¢cter indefinido con cl¨¢usulas indemnizatorias de 36, 24 y 12 millones para el caso de que fuese despedido en los tres a?os siguientes a su firma. Al final, Gil y Luis pactaron la renuncia por unos 15 millones.