En busca del 'Aguij¨®n'

I. C., Holanda ha reanudado la serie negra de los secuestros. Hace dos semanas le toc¨® el turno a Gerrit Jan Heijn, director adjunto y propietario, junto con su hermano mayor, de un imperio de la distribuci¨®n alimenticia que lleva su apellido y que se conoce por A. H., iniciales de su fundador, Albert Heijn. El secuestro del nieto de A. H. es el s¨¦ptimo en menos de 10 a?os y mantiene tan en vilo a la opini¨®n como la aprehensi¨®n en 1983 del rey de la cerveza, Alfred Heineken, liberado tras el pago de un rescate de 476 millones de pesetas.

Un autom¨®vil Audi 200 de color azul abandonado en una peque?a carretera bordeada de ¨¢rboles y dunas a tan s¨®lo un kil¨®metro del lujoso chal¨¦ familiar de Bloemendaal, no lejos de la ciudad holandesa de Haarlem, y un plant¨®n dado a su dentista fueron, el pasado 9 de septiembre, los primeros indicios de que algo anormal hab¨ªa sucedido a Gerrit Jan Heijn, de 56 a?os de edad, padre de cuatro hijos.Las primeras batidas organizadas por la polic¨ªa con perros y hasta con la ayuda de un helic¨®ptero no dan ning¨²n resultado y empieza entonces a abrirse camino la tesis del secuestro.

Pero ?qui¨¦n puede haber apresado al rey de las tiendas de comestibles? En la comisar¨ªa de Haarlem se reciben en los primeros d¨ªas m¨¢s de 170 llamadas y cuatro reivindicaciones, pero todas carecen de la indispensable prueba que permita otorgarles una cierta credibilidad.

A pesar del deseo de la familia de evitar cualquier publicidad, la polic¨ªa no tiene entonces m¨¢s remedio que revelar el secuestro y pedir a sus autores, a trav¨¦s de la televisi¨®n, que le brinden "una confirmaci¨®n, una prueba o alguna se?al de vida" del reh¨¦n. En vano.

Este silencio tan poco convencional incita a la Prensa a especular sobre la identidad del cancerbero de Heijn, animada por el portavoz de la comisar¨ªa de Haarlem, que reconoci¨®: "Es verdad que hemos pensado mucho en ¨¦l". ?l es Frans Meijer, conocido popularmente como Stekel (Aguij¨®n), el ¨²nico de los cinco secuestradores de Heineken a¨²n en libertad.

A diferencia de sus c¨®mplices, Meijer, condenado a 12 a?os de c¨¢rcel en rebeld¨ªa, se entreg¨® a la polic¨ªa en el a?o 1984 y consigui¨® hacerse pasar por loco, hasta el punto de que los investigadores creyeron que, tal y como aseguraba, hab¨ªa quemado en una playa los 476 millones del rescate y le ingresaron en un manicomio, de donde se escap¨® un a?o m¨¢s tarde.

De cuando en cuando, Aguij¨®n se manifiesta a¨²n llamando por tel¨¦fono a diarios como el Het Parool para expresar su remordimiento por el apresamiento de Heineken o para proponer a la revista Panorama una exclusiva a cambio de 25.000 florines (1,5 millones de pesetas).

Cuando el secuestro del rey de las tiendas de comestibles no hab¨ªa sido todav¨ªa divulgado, el rotativo Het Parool recibi¨® un extra?o mensaje telef¨®nico que al d¨ªa siguiente fue tambi¨¦n remitido por carta a su competidor De Telegraaf: "Heineken-Valeria-la polic¨ªa de Haarlem".

Mensaje-adivinanza

Heineken era el rey de la cerveza, Valeria es la hija del due?o de una peque?a cadena de supermercados raptada y liberada el a?o pasado y en la comisar¨ªa de Haarlem se pod¨ªa, acaso, obtener informaciones sobre un nuevo secuestro en curso. El mensaje-adivinanza encaja perfectamente con la personalidad del Agij¨®n.

A pesar de haber evocado su nombre en un primer momento, la polic¨ªa tiende ahora a disociar a Meijer del asunto. Sospecha que ha recuperado el rescate y que vive c¨®modamente en el extranjero, donde la Interpol le sigue buscando, aunque de cuando en cuando se da el gustazo de llamar por tel¨¦fono a los medios de comunicaci¨®n holandeses.

La explicaci¨®n parece veros¨ªmil, a menos que, como sostiene el peri¨®dico Algemeen Dagblad, con su segunda fechor¨ªa, realizada gracias a su nueva fisonom¨ªa -adquirida mediante una operaci¨®n de cirug¨ªa est¨¦tica-, Meijer pretenda obtener la puesta en libertad de sus cuatro compinches encarcelados y de paso otro rescate de... 50 millones de florines (2.975 millones de pesetas).

Director general adjunto de A. H., Gerrit Jan Heijn es, en realidad, el aut¨¦ntico jefe y principal accionista de un imperio que formalmente dirige su hermano Albert y que con sus 637 establecimientos controla la cuarta parte de la distribuci¨®n alimenticia en Holanda y un porcentaje apreciable de la industria del embalaje, al tiempo que posee 200 supermercados en EE UU. Emplea a 55.000 personas y su volumen de negocios es de 6.000 millones de d¨®lares (726.000 millones de pesetas). De ah¨ª que el rescate exigido pueda ser m¨¢s de seis veces superior al del rey de la cerveza.