'Cadena del deporte'

Maquinalmente acabo de poner en marcha mi televisor. En la primera cadena, videoclips, y deporte en la segunda... Para m¨¢s inri, el locutor del VHF dec¨ªa algo as¨ª como: "Ma?ana, a esta misma hora, seguiremos con esta retransmisi¨®n por esta misma cadena, la cadena del deporte".Lo de la cadena del deporte (y no es que el UHF le vaya muy a la zaga) era la constataci¨®n de una evidencia, que no una opini¨®n del locutor aludido. Y resulta chocante, y creo que lamentable, el que, en un pa¨ªs de tanto bajito/a y/o regordete/a y/o sedentario/a, se nos bombardee electr¨®nicamente con la reiterativa visi¨®n de tama?a acumulaci¨®n de m¨²sculos esforzados. ?Ir¨¢ la cosa por lo de los Mundiales de 1992? ?Es que nos preparan para una marat¨®n masiva en la que participaremos 30 o 35 millones de espa?oles para conmemorar apropiadamente tan importante evento? ?Nos tendremos que mover todos hacia el Este 42 kil¨®metros? ?Aguantar¨¢n los de Levante, nadando, el equivalente en millas? Adem¨¢s de que, con la coincidencia del 500? aniversario del descubrimiento de Am¨¦rica (y por la misma regla de tres), igual alguien intentar¨¢ que cada espa?ol se compre un yelmo completo (y la inseparable armadura, por supuesto). Y, en hablando de la colonizaci¨®n espa?ola de las Indias, creo tambi¨¦n (ya seriamente) que habr¨ªa tema para llenar horas y horas de agradable e instructiva programaci¨®n con simples charlas (no por charlas, ni simples, resultar¨ªan menos amenas) respecto a los curios¨ªsimos avatares de aquellos siglos, repletos de gestas irrepetibles y casi incre¨ªbles que la inmensa mayor¨ªa de los espa?oles, muy posiblemente, desconozcan, desconozcamos.

En tiempos de la que ahora se conoce como oprobiosa dictadura, si quer¨ªan evitar que las masas acudieran a una anunciada concentraci¨®n pol¨ªtica (o reducir al menos el n¨²mero de asistentes), publicaban para la misma fecha una buena retransmisi¨®n deportiva (o los famosos 100 mejores goles de la selecci¨®n espa?ola)... Y si ahora no est¨¢ claro ad¨®nde quiere alguien impedirnos (o disuadirnos de) la asistencia, habr¨ªa que preguntarse el d¨®nde es el lugar o estado al que desean llevarnos... Aunque, a lo mejor o peor, la cosa no es para tanto y se trata de los sempiternos pan y circo, pan y toros, pan y f¨²tbol, que ahora se resuman en pan y deporte... Si as¨ª fuese, ?para eso tanto progreso, tanto anhelado cambio?

Mira que me resist¨ªa, pero... de ma?ana no pasa... ?Me compro el v¨ªdeo!-