La divisi¨®n entre el Norte y el Sur impide el inicio de las votaciones en la Unesco

La batalla final por la direcci¨®n general de la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura (Unesco) empez¨® ayer con una prolongada discusi¨®n acerca de las cuestiones de procedimiento para llevar a cabo las votaciones en el consejo ejecutivo de 50 miembros. La polarizaci¨®n, creciente en los ¨²ltimos d¨ªas, entre los pa¨ªses ¨¢rabes y africanos, por un lado, y los occidentales, por otro, se expres¨® tambi¨¦n en las cuestiones formales e impidi¨® que se iniciaran las votaciones ayer, como estaba previsto.

Contra todos los pron¨®sticos, los miembros del Consejo Ejecutivo, acostumbrados, en los cuarenta a?os de historia de la Unesco, a consensuar el nombre del director general, no empezaron a votar y se entretuvieron en las modalidades de votaci¨®n, tras las que se escond¨ªan las posiciones de los tres principales candidatos: el senegal¨¦s y actual director general, Amadou Mahtar M'Bow, el paquistan¨ª Yaqub Jan y el espa?ol Federico Mayor Zaragoza.El bloque de los pa¨ªses ¨¢rabes africanos, m¨¢s cohesionado que nunca, deseaba votar inmediatamente, mientras que la mayor parte de los miembros del Consejo quer¨ªan asegurar la existencia de plazos de negociaci¨®n y la posibilidad de presentar nuevos candidatos entre las cinco votaciones posibles. Un sistema de votaciones seguidas facilita la reelecci¨®n del actual director general, Amadou Mahtar M'Bow, e impide la negociaci¨®n entre diversos bloques y la b¨²squeda de nuevos nombres para sucederle. La posibilidad de presentar nuevos candidatos entre votaci¨®n y votaci¨®n juega en contra de Federico Mayor.

El candidato espa?ol cuenta con posibilidades si ninguno de los otros dos candidatos obtiene la mayor¨ªa, pues aparece como tercero en discordia capaz de obtener el consenso. Incluso en el caso de una victoria de M'Bow, algunos observadores no descartan la posibilidad de que ¨¦ste decida una retirada honorable, tras demostrar su capacidad de aglutinar votos del Tercer Mundo. Para este caso, el hecho de que Mayor Zaragoza sea el ¨²nico candidato que ha rehuido el enfrentamiento directo con M'Bow le permitir¨ªa obtener votos de africanos y ¨¢rabes y aglutinar el consenso.

[El ex ministro de Educaci¨®n y Ciencia espa?ol y actual eurodiputado por el Centro Democr¨¢tico y Social (CDS), Federico Mayor Zaragoza, declar¨® ayer en Madrid tener "razonables posibilidades" de ser elegido nuevo director general, debido a que su candidatura "representa una opci¨®n independiente". "No soy un candidato de Occidente ni de ning¨²n grupo determinado de los cinco continentes, sino un independiente respaldado por una gran cantidad de personalidades, entre ellas una docena de premios Nobel", dijo Mayor a Radio Nacional de Espa?a.]

El 'factor Iglesias'

Por su parte, el nombre de un nocandidato, Enrique Iglesias, el ministro de Asuntos Exteriores de Uruguay, segu¨ªa abri¨¦ndose paso, principalmente entre los apoyos m¨¢s tibios de Jan. La eventualidad de su candidatura dejar¨ªa pr¨¢cticamente sin ninguna posibilidad al candidato del Gobierno espa?ol. Fuentes del Gobierno uruguayo aseguraron ayer que Iglesias podr¨ªa aceptar la candidatura s¨ª un grupo de pa¨ªses se lo ped¨ªa formalmente. Para muchos altos funcionarios de la Unesco, ¨¦ste es el signo inequ¨ªvoco de que, si el procedimiento lo permite, Iglesias aparecer¨¢ finalmente como candidato de consenso.

El consejo ejecutivo debe presentar ante la asamblea general, que se reunir¨¢ probablemente el 7 de noviembre, el nombre de un candidato, que est¨¢ obligado a obtener la mayor¨ªa entre los representantes de los pa¨ªses socios de la organizaci¨®n.

El consejo dispone de hasta cinco votaciones, la ¨²ltima entre los dos candidatos mejor clasificados. En caso de que su nombre sea rechazado por la asamblea, debe proponer otro en las 48 horas siguientes.