El toreo puro de Pepe Luis
ENVIADO ESPECIAL"Traerse el toro toreado", dice la ciencia de la tauromaquia, por transmisi¨®n oral, y visual menos, pues ya casi nadie torea as¨ª de puro. "Tray¨¦ndose el toro toreado", y m¨¢s, tore¨® ayer Pepe Luis V¨¢zquez, v¨¢stago del Pepe Luis V¨¢zquez famoso, cl¨¢sico y mitol¨®gico. Prodiga esa forma de torear a lo largo de los a?os que lleva pasando de puntillas por la fiesta, y ahora mismo empu?ar¨ªa el cetro del toreo, asignado en propiedad vitalicia.
Una utop¨ªa, claro, porque este tipo de toreros se conf¨ªan no se sabe cu¨¢ndo, se inspiran no se sabe c¨®mo, y d¨®nde, es otro misterio. ?Confiarse e inspirarse, todo a la vez? ?Oz¨²! Ellos dicen del toro: que ha de ser noble. M¨¢s bien ser¨¢ que han de verlo propicio, a su manera, dado que toros nobles les salen unos cuantos en la temporada, y nada.
Piriz / Romero, Paula, V¨¢quez, Caro, Cepeda, Peralta
Toros de Bernardino Piriz, discretos de presencia, manejables. Curro Romero: media delantera (ovaci¨®n y salida al tercio). Rafael de Paula: estocada ca¨ªda (ovaci¨®n y salida al tercio). Pepe Luis V¨¢zquez: estocada baja (oreja). Curro Caro: bajonazo a toro arrancado perdiendo la muleta (vuelta por su cuenta). Fernando Cepeda: estocada (dos orejas). Jos¨¦ Luis Peralta: estocada (vuelta).Plaza de la Maestranza, 25 de octubre. Festival a beneficio de la Fundaci¨®n Tagore.
El de ayer deb¨ªa de ser uno de esos toros propicios, all¨¢ penas si ten¨ªa casta, con el genio agresivo que tal condici¨®n conlleva. Y la inspiraci¨®n estar¨ªa quiz¨¢ en los claroscuros de la tarde c¨¢rdena franciscana, olorosa a humedades y a casta?as as¨¢s, que ya crujen y humean sobre las brasas por las calles de Sevilla. Tarde de toros para aficionados, que saben distinguir toreros de pegapases; el pagapasismo dejarlo ir, el toreo puro celebrarlo con el ?ole! que sale del alma y paladearlo despu¨¦s en silencio.
Se lo tra¨ªa toreado Pepe Luis -el toro-, desenga?¨¢ndolo con la carganz¨®n de la suerte, primero en tandas de naturales, despu¨¦s de redondos, abroch¨¢ndolas con el de pecho, la trincherilla, el molinete. Hubo un cambio de mano y un kikirik¨ª de alboroto. Y todo muy ligado, con mucha hondura, con mucho arte, con toda la autoridad que reclama la torer¨ªa cuando es cabal.
Otra torer¨ªa profunda hubo antes en la tarde c¨¢rdena: Curro. El capotillo chico lo abri¨® en lo medios para mecer la ver¨®nica y lo cerr¨® para dibujar media ver¨®nica lenta, pulcra, exquisita. La faena de muleta tambi¨¦n fue de apuntes y detalles gustosos. Acompas¨® con la cintura el natural y el redondo, siempre cargando la suerte y prolongando el muletazo hasta donde le permit¨ªan las embestidas cortas.
Entr¨® en liza despu¨¦s Paula y ell capot¨®n de g¨¹erta-jasule no le cog¨ªa el ritmo al toro, salvo en media ver¨®nica; tampoco la muleta de los hechizos, salvo en dos tandas de redondos adormecidos y cadenciosos. A Curro Caro tambi¨¦n le acarici¨® la inspiraci¨®n para lancear a la ver¨®nica y en algunos pasajes de su larga faena de muleta, a la que falt¨® hondura, y s¨®lo eso.
Cepeda tore¨® mucho y bien, templando naturales y derechazos, lig¨¢ndolos, engarzando los de pecho alternativamente con cada mano, a la moda actual. A veces remataba las suertes fundamentales un poco hacia afuera, se aliviaba con el pico, pero dominaba el toro y la situaci¨®n y la faena, que le sali¨® redonda porque estuvo muy bien constru¨ªda, arrebat¨® al p¨²blico.
A Jos¨¦ Luis Peralta el sombrero de ala ancha le sentaba como un tiro; lo llevaba encima de la cabeza como las aguadoras el c¨¢ntaro, y debi¨® darse cuenta enseguida pues lo arroj¨® al callej¨®n. Entonces empez¨® a torear bien. Los naturales que ci?¨®, bajando mucho la mano, fueron importantes. Hab¨ªa torer¨ªa. Y hab¨ªa valor impresionante pues, en el primer pase, el toro le tir¨¦ un terrible derrote al cuello, que dej¨® all¨ª un enorme rasg¨®n sanguinolento, y ni se quej¨®. Sigui¨® toreando, tan tranquilo. La procesi¨®n ir¨ªa por dentro, pero los toreros son as¨ª de enterizos. Quiz¨¢ porque en los toros no se pitan penaltis que valen goles. En esta fiesta el valor se supone, no me llore, y el que vale, torea. Y el que m¨¢s puro torea, ese es el que m¨¢s vale.
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