Ortega ofrece a la 'contra' un plan de paz de 11 puntos

El presidente nicarag¨¹ense, Daniel Ortega, propuso ayer en Washington un alto el fuego de un mes en la guerra que desangra a su pa¨ªs, que entrar¨ªa en vigor el 5 de diciembre, y la incorporaci¨®n de los contra que lo deseen al di¨¢logo pol¨ªtico interno en Nicaragua tras la entrega de las armas, que ser¨ªa correspondida con una amnist¨ªa autom¨¢tica. Ortega, cobij¨¢ndose bajo el Congreso de Estados Unidos y con la colaboraci¨®n del cardenal Obando y Bravo, dio el primer paso para poner fin a la guerra que enfrenta a los sandinistas con los contra, financiados y dirigidos por Estados Unidos.

Ortega present¨® una propuesta par a el alto el fuego, que durar¨ªa 30 d¨ªas, de 11 puntos que, seg¨²n sus palabras, "ofrece a los rebeldes todas las seguridades y garant¨ªas que necesitan". El plan pide a EE UU que cese inmediatamente la ayuda a la contra.El dirigente nicarag¨¹ense ha querido hacerlo p¨²blico en Washington para subrayar que Estados Unidos es parte clave en el conflicto.

Los once puntos del plan son t¨¦cnicos. El Gobierno sandinista no acepta abrir una negociaci¨®n pol¨ªtica con sus enemigos, pero permite a ¨¦stos la vuelta a la actividad pol¨ªtica en Nicaragua.

El cardenal arzobispo de Managua, monse?or Miguel Obandov Bravo, que lleg¨® en la noche del jueves a Washington y regres¨®. ayer a Managua v¨ªa Miami, dijo que entregar¨¢ inmediatamente la propuesta por escrito a los dirigentes de la contra.

Sede de las negociaciones

Daniel Ortega quiere que las negociaciones se realicen aqu¨ª, pero los rebeldes se niegan y piden ir a Managua. Finalmente podr¨ªan tener lugar en alg¨²n pa¨ªs centroamericano, quiz¨¢s Costa Rica.El l¨ªder nicarag¨¹ense se reuni¨® ayer en la Nunciatura Apost¨®lica de la Santa Sede, en Washington, con el presidente de la C¨¢mara de Representantes de EE UU, el dem¨®crata Jim Wright, y con el cardenal Obando, para discutir la propuesta y lograr el apoyo de estas dos personalidades antes de trasladarla a los rebeldes. Wright dijo que es un nuevo paso hacia la paz "aunque ¨¦sta no est¨¦ a¨²n al alcance de la mano". Wright elogi¨® la "buena f¨¦" de los sandinistas. La propuesta, que Ortega calific¨® de "flexible" y que "no coloca a nadie contra la pared", establece que el alto el fuego ser¨¢ por un mes. Se trata de un primer paso, "es una propuesta, no un ultim¨¢tum", dijo el dirigente sandinista.

Las tropas rebeldes deber¨¢n concentrarse en tres zonas en el interior de Nicaragua y 15 d¨ªas antes de la entrada en vigor del alto el fuego el ej¨¦rcito sandinista se retirar¨¢ de las mismas para permitir el reagrupamiento de los contras, que no deber¨¢n entregar a¨²n sus armas.

Durante el cese el fuego no podr¨¢n recibir ayuda militar y s¨®lo ayuda humanitaria, a trav¨¦s de agencias neutrales o instituciones internacionales que mutuamente acuerden las partes.

Al finalizar el plazo de vigencia del alto el fuego, (el 5 de enero si ¨¦ste comenzara el 5 de diciembre) los rebeldes deber¨¢n entregar sus armas en presencia del comit¨¦ de verificaci¨®n y seguimiento, ¨®rgano creado en los acuerdos de Esquipulas 2, de la Comisi¨®n de Reconciliaci¨®n nicarag¨¹ense y de un comit¨¦ de mediaci¨®n.

Este comit¨¦ es una novedad que ofrece crear Ortega y que estar¨ªa integrado por personalidades norteamericanas y latinoamericanas. Ayer se cit¨® como uno de sus miembros a Paul Warnke, negociador de control de armamentos en la presidencia de Jimmy Carter.

Amnist¨ªa autom¨¢tica

Al deponer las armas, los contras ser¨¢n cubiertos autom¨¢ticamente por la amnist¨ªa y podr¨¢n enviar delegados al interior de Nicaragua para tomar parte en el di¨¢logo de reconciliaci¨®n nacional. Nicaragua se compromete a ayudar a los que no quieran volver al pa¨ªs. Finalmente, cuando Honduras deje de cobijar a los rebeldes y EEUU les suspenda su ayuda, los sandinistas levantar¨¢n el estado de emergencia y decretar¨¢n una amplia amnist¨ªa.Ortega, que lleg¨® el martes a Washington para dirigirse a la Asamblea General de la OEA (Organizaci¨®n de Estados Americanos), ha prolongado su estancia en EE UU en un intento de conseguir el apoyo del Congreso a sus pasos negociadores y aislar a la Casa Blanca, a la que presenta como la ¨²nica parte contraria al plan de paz de Esquipulas. Tambi¨¦n ha intentado, sin ¨¦xito, forzar una. negociaci¨®n directa entre Nicaragua y Estados Unidos, pero la Administraci¨®n dijo ayer que "ser¨ªa un error involucrarse en un proceso de negociaci¨®n que debe ser regional".

"Nuestra estrategia dual de presi¨®n y diplomacia ha conseguido que los sandinistas inicien la negociaci¨®n con los rebeldes", dijo ayer el Departamento de Estado.

Cuando EEUU considere que estos contactos son "serios" aceptar¨¢ un di¨¢logo con los sandinistas pero en un contexto regional, junto con el resto de los pa¨ªses centroamericanos, se?alaron fuentes oficiales.

La Casa Blanca manifest¨® ayer su irritaci¨®n por el papel que est¨¢ jugando el presidente de la C¨¢mara en esta negociaci¨®n y que calific¨® de "interferencia".

El secretario de Estado, George Shultz, acudi¨® el jueves por la tarde al Congreso para entrevistarse con Wright, que ya se hab¨ªa visto con Ortega y con los dirigentes de la contra.

Los sandinistas, que ya ofrecieron al congresista dem¨®crata el papel de mediador que rechaz¨®, quieren que Wright legitime su oferta de negociaci¨®n con los rebeldes y que el Congreso norteamericano verifique de alguna forma el cumplimiento por Nicaragua del Plan Arias..

Parlamentarios norteamericanos o delegados suyos podr¨ªan formar parte del comit¨¦ de mediaci¨®n que Ortega propone crear y que ha aceptado Wright, el principal apoyo del Gobierno de Managua en Washington.