Tailandia destaca el papel del rey Juan Carlos como garante de la democracia

Diversas personalidades tailandesas, desde el primer ministro, general Prem Tinsulanonda, hasta el rector de la universidad de Chulalongkorn, resaltaron ayer la personalidad del rey Juan Carlos como garante de la democracia en Espa?a, destacando su papel en momentos dif¨ªciles, como el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981. En un pa¨ªs en el que el recuerdo de las amenazas de involuci¨®n pol¨ªtica est¨¢ casi siempre presente -Prem tuvo, desde 1980, que hacer frente a dos intentonas golpistas de signo diferente-, este papel moderador del rey Juan Carlos resulta especialmente significativo.

El propio Juan Carlos, al responder a los elogios del rector de la universidad de Bangkok, donde fue ayer investido doctor honoris causa en ciencias pol¨ªticas, coment¨® acerca de su contribuci¨®n a la consolidaci¨®n de la democracia en Espa?a: "Me he limitado simplemente a mantener mi compromiso de ser el rey de todos los espa?oles".La visita de los reyes Juan Carlos y Sof¨ªa a Tailandia mantuvo ayer, pen¨²ltima jornada de su estancia oficial, un car¨¢cter protocolario y pr¨¢cticamente tur¨ªstico. Tras el acto acad¨¦mico en la universidad, en donde fue nombrado doctor honoris causa, los reyes y la infanta Cristina visitaron brevemente el palacio de Wat Phra Keo, o de Buda Esmerald (Buda Verde), terminado de construir en los aleda?os del palacio real en 1784, dos a?os despu¨¦s de que Bangkok fuese declarada capital de Tailandia. Una peque?a estatua de Buda, en jade verde, encontrada en el siglo XVI, constituye el centro del templo de Phra Keo, un importante centro religioso en un pa¨ªs en el que la Iglesia ocupa un papel primordial en el orden social y hasta pol¨ªtico (son muchos los personajes de la vida p¨²blica que, una vez concluido su mandato se retiran durante varios a?os a meditar en un monasterio budista). Por ello, los organizadores de la visita real consideraron que no pod¨ªa faltar esta visita a un templo, como tampoco faltar¨¢n hoy recorridos por monasterios en la ciudad de Chiangmai, segunda en importancia del pa¨ªs (120.000 habitantes), adonde los soberanos espa?oles se trasladaron a primera hora de esta ma?ana.

A continuaci¨®n, los soberanos espa?oles, que, al igual que ocurri¨® en el templo poco antes, no fueron acompa?ados por los reyes tailandeses, realizaron un largo recorrido por el r¨ªo Chao Paya (Gran R¨ªo), que divide Bangkok y constituye el centro de la vida en la populosa, abigarrada y bulliciosa capital tailandesa. A bordo del Iriental Queen, un barco de lujo para turistas adinerados, el rey y la infanta Cristina pudieron practicar a placer una de sus aficiones favoritas, fotografiando los templos que se alzan a ambas orillas del r¨ªo. Por la tarde, la reina y la infanta se dedicaron a hacer compras, confundidas entre los turistas, en la t¨ªpica zona de Silon Village, acaso la capital mundial de la falsificaci¨®n.

Un encuentro, m¨¢s bien protocolario, del Rey con el general Prem, y la entrevista que el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, mantuvo con su colega tailand¨¦s, marcaron los ¨²nicos puntos pol¨ªticos en el orden del d¨ªa. Fern¨¢ndez Ord¨®?ez y Siddih Savetsila intercambiaron los instrumentos de ratificaci¨®n del convenio hispano-tailand¨¦s, que posibilitar¨¢ que presos espa?oles en este pa¨ªs puedan cumplir parte de sus condenas en Espa?a.

Igualmente, seg¨²n medios diplom¨¢ticos espa?oles en Bangkok, tras la visita de los reyes -que ma?ana concluir¨¢ con una invitaci¨®n no oficial para que los reyes Bhumibol y Sirikit visiten Espa?a, lo que no hacen desde 1960-, "se han puesto los cimientos" para llegar a un pr¨®ximo convenio econ¨®mico bilateral "que facilite la entrada en Tailandia de no pocas empresas espa?olas, que hoy est¨¢n simplemente llamando a la puerta".