La vanguardia cinematogr¨¢fica no existe hoy como movimiento, seg¨²n el investigador Mario Verdone
El director del Instituto de Ciencias del Espect¨¢culo, M¨²sica y Comunicaci¨®n de la universidad de Roma se halla en Barcelona para intervenir en los debates que sobre el cine futurista se celebran dentro del festival Cinemadart. Seg¨²n Verdone, la vanguardia cinematogr¨¢fica no existe en la actualidad como movimiento organizado porque las b¨²squedas son individuales, sin una convicci¨®n colectiva para imponer una determinada po¨¦tica, como demostraban los manifiestos de las vanguardias hist¨®ricas de los a?os veinte y treinta.
Verdone considera que el underground norteamericano de los a?os sesenta es el ¨²ltimo movimiento de este tipo, con ciertos caracteres de propuesta colectiva. "En algunos casos, como con el neorrealismo, nos encontramos con que las obras anteceden a la teorizaci¨®n del movimiento que se produce a posteriori".Para Verdone, lo que define una vanguardia es la voluntad de romper con lo viejo, una reivindicaci¨®n de lo nuevo y la b¨²squeda de lenguajes in¨¦ditos. "Esta actitud no debe confundirse con los meros adelantos tecnol¨®gicos. El cine de alta definici¨®n, por ejemplo, supone una b¨²squeda t¨¦cnica pero no conceptual". Para Verdone, la investigaci¨®n vanguardista en la actualidad se produce fuera de los circuitos comerciales y de producci¨®n habituales porque apenas existe la figura del mecenas.
Futurismo
En el contexto de las vanguardias hist¨®ricas, Verdone destaca la importancia de los futuristas. En el caso del cine, "no se trata tanto de su propia producci¨®n cinematogr¨¢fica, algunos de cuyos t¨ªtulos fundamentales se han destruido y no conocemos, sino de que es un movimiento que teoriza expresamente sobre el cine y sus influencias son rastreables en trabajos que no militan expresamente dentro del futurismo".El manifiesto futurista sobre el cine data de 1917 y de esta matriz ¨²nica saldr¨¢n trabajos tan dispares como los de Ren¨¦ Clair, Viking Eggeling o Walter Ruttman. "El mensaje central del manifiesto propon¨ªa liberar al cine. ?De qu¨¦?. De los mercaderes, de los simples prestigitadores... El hombre deja de ser el protagonista en favor de los objetos -y el cuerpo humano es un objeto en este sentido- y se tiende a la abstracci¨®n". Verdone recuerda un filme de 1912 dibujado a mano sobre la propia pel¨ªcula, que anticipa esta ruptura con lo figurativo y naturalista.
Para el profesor romano, el problema de las etiquetas es secundario porque cada pa¨ªs tiene su vanguardia hist¨®rica (el surrealismo franc¨¦s, el expresionismo alem¨¢n, el ultra¨ªsmo espa?ol o la FEKS sovi¨¦tica). "El futurismo fue el movimiento que sent¨® las bases de esta renovaci¨®n". La atenci¨®n futurista hacia nuevos lenguajes se descubre en su reivindicaci¨®n de aspectos cotidianos como el grafismo o la publicidad, "que analizan como un elemento que influye en el entorno y reclaman el espect¨¢culo de la calle, de los r¨®tulos, de los carteles. El inter¨¦s por el cine de los futuristas se descubre incluso en trabajos ajenos al medio como la novela de Marinetti Un vientre de mujer, basado en una correspondercia epistolar que se organiza como un verdadero montaje de secuencias o la confusi¨®n de tiempo y espacio en el trabajo teatral de Pino Masnata (Almas guionizadas) que posteriormente desicubriremos en, por ejemplo, la obra de Alain Resnais. En el manifiesto de la literatura futurista, de 1912, Marinetti propone hacer montajes de im¨¢genes y habla de analog¨ªa, un concepto claramente visual".
En general, el movimiento futurista surge en el contexto de la nueva sociedad industrial y, en lugar de rechazarla, la reclama.
Anoche, Verdone celebr¨® una conferencia en el Instituto Italiano de cultura sobre el cine italiano de los a?os ochenta. Seg¨²n Verdone, esta cinematograf¨ªa ha perdido grandes nombres y no tiene recambios a este nivel, pero s¨ª aparecen nuevos autores que podr¨ªan agruparse en torno a los ejercicios c¨®micos, te?idos de melancol¨ªa, evitando la vulgaridad, y quienes trabajan en el drama intimista. Verdone resume este panorama afirmando que es un cine con trabajadores de la l¨¢grima y trabajadores de la risa.
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