M¨¢xima alerta en los campos palestinos libaneses trae la operaci¨®n antiisrael¨ª con un ala delta
Los habitantes de los campamentos palestinos de Sid¨®n, Tiro y Beirut, blancos habituales de los bombardeos israel¨ªes, escrutaban ayer el cielo a la espera de los aviones con la estrella de David pintada en sus fuselajes. Israel, saben los refugiados, no ya a dejar impune la audaz operaci¨®n con ala delta ef¨¦ctuada en la noche del mi¨¦rcoles por un comando palestino en la alta Galfica. IA ¨²nica duda es saber cu¨¢ndo y d¨®nde descargar¨¢ su ira. Seis muertos y siete heridos es un elevad¨ªsimo precio en sangre para el Tsabal, la espada del Estado israel¨ª.
A primeras horas de la tarde de ayer, s¨®lo el Frente Popular de Liberaci¨®n de Palestina Comando General (FPLP-CG) hab¨ªa reivindicado el ataque contra el campamento militar israel¨ª de Guibor (h¨¦roe en hebreo), pr¨®ximo a la localidad de Kiriat Shmona.Ese grupo, minoritario en el seno de la resistencia palestina, est¨¢ dirigido por Ahmed Jibril, un radical en buenos t¨¦rminos con sirios y libios y profundamente hostil al liderazgo, en su opini¨®n, "demasiado moderado" de Yasir Arafat. En un comunicado escrito difundido en Damasco, el citado grupo afirma que la operaci¨®n fue efectuada por "la unidad del m¨¢rtir Abu Anirnar Adham", con el objetivo de recordar "la eficacia de la lucha armada".
Al mismo tiempo, el general Dam Shornron, jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito hebreo, confesaba en la radio israel¨ª que el ataque hab¨ªa supuesto un "golpe muy duro". "Es muy dif¨ªcil detectar ingenios volantes ligeros", se lament¨® el general. De hecho, se?alaron fuentes de las organizaciones pales ' tinas y libanesas que combaten a Israel, el ingenioso m¨¦todo a¨¦reo empleado en la noche del mi¨¦rcoles es el ¨²nico modo de franquear la doble muralla con la que el Ej¨¦rcito hebreo protege su frontera septentrional.
Desde su retirada de L¨ªbano, Israel cuenta en el sur de ese pa¨ªs con una llamada zona de seguridad patrullada por sus hombres y milicianos locales, que refuerza una compleja barrera electr¨®nica establecida en la frontera misma.
Abu Animar Adham, hasta ahora un an¨®nimo palestino de 22 a?os, manejando un ala delta provista de un peque?o y silencioso motor, fue el autor de laverdadera haza?a que supone franquear esos muros y penetra en territorio israel¨ª, inform¨® Abul Fida Onirane, responsable militar del 17PLP-CG en los campamentos de Sid¨®n.
El piloto estaba provisto de gafas infrarrojas para visi¨®n nocturna, metralleta sovi¨¦tica y granadas. Tras ' efectuar su asalto sorpresa, el palestino, declar¨® Abul Fida Ornrane, se suicid¨® con los explosivos que llevaba encima.Planeando a baja altura
Esa versi¨®n no contradice la fa cilitada por los israel¨ªes. Los portavoces militares hebreos afirman que, en la noche del mi¨¦rcoles, un n¨²mero indeter minado de palestinos, al menos dos, intent¨® infiltrarse con alas delta motorizadas en la alta Ga lilea, a partir de territorio ?iba n¨¦s. S¨®lo uno, planeando a bajaaltura, consigui¨® sortear las barreras y aterrizar en la vecindad de? campamento de Guibor, encargado de la protecci¨®n de Kiriat Shinona. El hombre del otro artefacto a¨¦reo fue muerto en la zona de seguridad israel¨ª del sur de L¨ªbano.El asaltante sorprendi¨® dormidos a los soldados israel¨ªes, sobre cuyas tiendas abri¨® fuego con una metralleta y arroj¨® varias granadas. "Escuchamos r¨¢fagas y, antes de que tuvi¨¦ramos tiempo de levantarnos y coger nuestras armas, empezaron las explosiones", relat¨® un superviviente herido a los periodistas israel¨ªes que se desplazaron al campamento. El soldado, muy impresionado, seg¨²n los informadores, a?adi¨® que el tiroteo dur¨® "una eternidad", pero, al parecer, no se prolong¨® m¨¢s de un cuarto de hora.
Desde la invasi¨®n israel¨ª de L¨ªbano en 1982, los habitantes de la alta Galilea no hab¨ªan vivido una noche de pesadilla semejante a la del mi¨¦rcoles aljueves. Un total de seis cad¨¢veres y siete heridos es un pesado balance para un Ej¨¦rcito como el israel¨ª que se esmera en evitar sus ba jas, que es capaz de movilizar graiiides medios para rescatar a un soldado herido, perdido o capiturado. Pero a¨²n es m¨¢s grave la sensaci¨®n de inseguridad provocada por un ataque calificado por los mismos portavoces militares israel¨ªes de "audaz", "espectacular" y "suicida".
Israel justific¨® precisamente su rivasi¨®n de L¨ªbano como un intento de devolver la paz a la reg.¨®n de la alta Galilea, y en particular a la poblaci¨®n de Kiriat Shmona, hostigada por los guerrilleros palestinos.
Los habitantes de Kiriat Sh -nona pasaron la noche en sus? refugios por primera vez en a?os, mientras helic¨®pteros, tanques e infantes realizaban en los alrededores y en la zona de seguridad una fren¨¦tica batida, a la b¨²squeda de otros posibles coinandos a¨¦reos palestinos.
Los israel¨ªes, afirman los enviados especiales, estaban muy neiviosos, ten¨ªan los dedos en los gatillos, y un ingl¨¦s" habitante de un k?butz, result¨® herido por error.
Ya el 7 de marzo de 1981 dos coinbatientes palestinos pretendicron penetrar en la alta Galilea a bordo de alas delta provista, de peque?os motores de ap,)yo, pero aquella intentona se sald¨® con la detenci¨®n de aw,bos.
En otra ocasi¨®n, fue usado infructuosamente un globo. Intentos de infiltraci¨®n por mar han sido y son m¨¢s frecuentes, casi siempre con resultados frustrantes para los guerrilleros.
El miedo palestino
En este ¨¢rea del mundo donde diversas comunidades luchan despiadadamente por conquistaii- un lugar bajo el sol, al miedo y al dolor de unos sigue inevitablemente el de sus vecinos. Los palestinos viv¨ªan ayer el terror que hab¨ªan sufrido horas antes los israel¨ªes de la alta Galilea. Eri sus campamentos libaneses se masticaba la angustia, en particular en los del valle de la Bekoia, donde el grupo de Ahmed Jibril tiene al menos cinco bases.
Los corresponsales en la Bekzia informaron que los guerrilleros hab¨ªan abandonado sus cuiarteles para acampar disperscis al aire libre. Su precauci¨®n esi l¨®gica. Desde comienzos de este a?o, la aviaci¨®n israel¨ª ha atacado en 17 ocasiones objetives palestinos en L¨ªbano y ha provocado 89 muertos y 205 heridos.
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