Esta coca¨ªna es m¨ªa

Un espa?ol, Joaqu¨ªn Codes Terrer, condenado a 10 a?os de prisi¨®n por un delito de tr¨¢fico de coca¨ªna cometido por su joven amante, permanece desde hace cuatro a?os en la prisi¨®n de Lurigancho (Per¨²), al negarse a solicitar cualquier reducci¨®n de pena o traslado a Espa?a que comporte la asunci¨®n de su culpabilidad. Durante todo este tiempo sus padres han entregado seis millones de pesetas para conseguir la puesta en libertad de su hijo, cantidad que ahora consideran que les ha sido estafada.

El ministro de Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, se interesar¨¢ por este espa?ol durante su pr¨®xima visita a Per¨².Joaqu¨ªn Codes, de 32 a?os, se hizo responsable de los 119 gramos de coca¨ªna encontrados por las autoridades aduaneras peruanas, en octubre de 1983, en la chaqueta de su novia antes de tomar el avi¨®n de regreso a Espa?a.

Francine Carrera Dumont, su amante, le hab¨ªa pedido que se declarara culpable, asegur¨¢ndole que un abogado as¨ª se lo hab¨ªa aconsejado y que en 15 d¨ªas saldr¨ªa en libertad. Todos estos argumentos, incluido un reconocimiento de culpa de la joven, est¨¢n recogidos en una carta que, despu¨¦s de haber sido autentificada por expertos graf¨®logos de la polic¨ªa como letra de Francine, no const¨® como prueba de sumario.

Francine Carrera, una mujer rubia y atractiva de 24 a?os, fue puesta en libertad y se march¨® a vivir durante un tiempo con el hijastro de uno de los m¨¢s importantes narcotraficantes de Per¨², Carlos Langberg. En la actualidad viaja a Espa?a con asiduidad y reside temporalmente en Madrid y Barcelona.

Mientras tanto, la familia de Joaqu¨ªn Codes, auxiliar de vuelo de la compa?¨ªa Iberia en el momento de su detenci¨®n, contin¨²a haciendo gestiones para conseguir su libertad y se queja de la inmensa corrupci¨®n de la justicia peruana que ya les ha costado algo m¨¢s de seis millones de pesetas.

Seg¨²n el c¨®nsul espa?ol en Per¨², la salud mental de Joaqu¨ªn Codes se ha deteriorado desde que fue internado en el penal de Lurigancho, y se ha mostrado reacio a firmar su petici¨®n de cumplimiento de pena en una prisi¨®n espa?ola que, mediante un convenio hispano-peruano, es efectivo desde el pasado 9 de junio.

El resto de los presos espa?oles encarcelados en Per¨² -Juan Rocamora, Enrique Coll: dos kilos de coca¨ªna; Osuna, ATS: 600 gramos; Ur¨ªa: tr¨¢fico de estupefacientes; Tremps: 400 gramos; Alcalde: 15 gramos; Serra: 270 gramos; Tener¨ªa y San Isidro, expulsados del mercante donde trabajaban por consumir droga, y Orovio, por apropiaci¨®n il¨ªcita de dinero- esperan verse favorecidos por este convenio y poder cumplir sus penas en Espa?a.