Los forenses afirman que Agust¨ªn Rueda ten¨ªa golpes en el 70% de su cuerpo
JOS? YOLDI, Domingo Sastre y Gregorio Arroyo, forenses que realizaron la autopsia del recluso Agust¨ªn Rueda apaleado y muerto en la prisi¨®n de Carabanchel el 13 de marzo de 1978, afirmaron ayer que el preso fallecido presentaba golpes en el 70% de la superficie de su cuerpo. Las afirmaciones de estos dos peritos de que Rueda fue objeto de la paliza "generalizada, prolongada, intensa y t¨¦cnica" fueron confirmadas por otros seis m¨¦dicos forenses que intervinieron en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid
Los peritos explicaron que la paliza fue generalizada porque s¨®lo el 30% de la superficie del cuerpo del recluso no ten¨ªa contusiones; fue prolongada porque "no se hizo en cinco minutos" y fue realizada por varias personas; fue intensa por la potencia de los golpes, que deriv¨® en una p¨¦rdida de m¨¢s de tres litros de sangre, y, finalmente, fue t¨¦cnica porque no hab¨ªa golpes en ¨®rganos vitales.Seg¨²n los forenses, es significativo que no hubiera golpes en la nuca o en el cr¨¢neo, que hubieran producido al detenido la muerte instant¨¢nea.
Los forenses aseguraron que el origen de las lesiones que presentaban Rueda y los otros presos golpeados era el mismo y que se produjeron en un espacio de tiempo parecido, por ejemplo, la misma ma?ana. A?adieron que ninguna de las lesiones de Rueda fue posterior.
Esto destruye la hip¨®tesis de la defensa que supone que la muerte de Rueda fue producto de golpes posteriores a la reducci¨®n del recluso por los funcionarios en la ma?ana del d¨ªa 13 y que, seg¨²n esa hip¨®tesis, podr¨ªan haber sido causados por otros presos, m¨¢s concretamente de la Coordinadora de Presos en Lucha (Copel). Seg¨²n los m¨¦dicos, todos los reclusos ten¨ªan signos de haber sido golpeados con defensas (porras de goma), aunque Rueda presentaba adem¨¢s heridas .producidas por alg¨²n objeto duro no flexible. Los forenses precisaron tambi¨¦n, a preguntas de la acusaci¨®n, que por la posici¨®n de los golpes -gran parte de ellos en los antebrazos- Rueda se encontraba en una actitud defensiva, con la manos cubri¨¦ndose la cabeza, y no en una posible actitud agresora, lo que invalida la tesis de los funcionarios de que le -golpearon en la mano para quitarle un cuchillo con el que, seg¨²n los funcionarios, el fallecido les atacaba.
No hubo infarto
Los doctores negaron que Agust¨ªn Rueda hubiera sufrido un infarto, y precisaron que lo que hubo fue una infiltraci¨®n sangu¨ªnea en el endocardio como consecuencia de los golpes recibidos.
Sobre la causa de la muerte, los m¨¦dicos afirmaron que se produjo por choque hipovol¨¦mico (disminuci¨®n de sangre en el torrente circulatorio), ya que como consecuencia de los golpes perdi¨® en hematomas alrededor del 607. de la sangre. Los forenses precisaron que hasta el 20% de p¨¦rdida no aparecen s¨ªntomas. Entre el 20% y el 50% de p¨¦rdida de sangre se reduce la tensi¨®n y aumentan las pulsaciones. Los m¨¦dicos que asistieron a Rueda debieron de haberlo apreciado y ordenar su ingreso para realizar transfusiones.
En la tercera fase, de m¨¢s del 50%, como fue la de Rueda, la situaci¨®n es irreversible, con un aumento del pulso a 130 pulsaciones y una reducci¨®n de la tensi¨®n a menos de 7. Este informe contradice lo afirmado por los m¨¦dicos procesados Jos¨¦ Mar¨ªa Barigou y Jos¨¦ Luis Casas, quienes aseguraron que las lesiones de Rueda no revest¨ªan gravedad.
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