Inclinaci¨®n naturalista
Creadora de originales y atrevidas im¨¢genes sobre temas cl¨¢sicos -naturaleza, desnudo, retrato-, Imogen Cunningham muestra en su estilo una marcada inclinaci¨®n naturalista alejada de la agresividad est¨¦tica generada en las grandes ciudades industriales.La utilizaci¨®n de luz natural, espacios abiertos y exteriores rurales son quiz¨¢ las caracter¨ªsticas m¨¢s constantes de su obra. Dada su versatilidad, no puede decirse que su trabajo se pueda reconocer por un monol¨ªtico y definido estilo o por una tem¨¢tica concreta como sucede con otros artistas de su ¨¦poca. Entrevistada sobre el tema, dijo preferir la variedad a repetirse hasta la saciedad como Ansel Adams, con sus paisajes monta?osos.
No obstante, algunas de sus m¨¢s populares fotos, como Los lirios (1929) o La cama deshecha (1957), entre otras, se han convertido en im¨¢genes arquet¨ªpicas, pudi¨¦ndose encontrar fotos recientes de autores contempor¨¢neos que, si bien no han plagiado de manera evidente, s¨ª que se han apropiado de manera poco imaginativa de los conceptos est¨¦ticos de Cunningham.
Me refiero a ese tipo de fotos que cuando se ven por primera vez da la impresi¨®n de que ya se conoc¨ªan.
Lo que realmente tiene vigencia y valor hoy d¨ªa en el legado de esta artista es, aparte de su independencia y su capacidad de trabajo, el gusto por los temas sin artificio, la riqueza de la iluminaci¨®n natural y un positivado de tonos suaves y armoniosos realizado con maestr¨ªa y rigor.
Saliendo de la exposici¨®n no puede uno por menos que sentir un regusto de im¨¢genes cl¨¢sicas t¨ªpicamente americanas de la Costa Oeste, un poco como la marca de tabaco que la patrocina, en contraste con una fotograf¨ªa neoyorquina y europea de la misma ¨¦poca m¨¢s expresionista y urbana.
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