Brando es hoy Kubrick

Tras realizar Espartaco, una pel¨ªcula que hab¨ªa empezado Anthony Mann, pero que por desavenencias con su productor-actor, Kirk Douglas, acab¨® en sus manos, Stanley Kubrick acept¨® dirigir la adaptaci¨®n de una novela de Charles Neider, que en la pantalla se llamar¨ªa One-Eye Jack, con tambi¨¦n una ostentosa figura de productor-actor endiosando el proyecto: Marlon Brando. Esa obra era un western particularmente at¨ªpico, y la elecci¨®n de Kubrick era adecuad¨ªsima, conocida como es su afici¨®n a redimensionar g¨¦neros cl¨¢sicos.Pero como en cine -y no s¨®lo en cine- la gente no se entiende muy bien entre s¨ª, Brando y Kubrick acabaron divorci¨¢ndose.

Brando ten¨ªa entre ceja y ceja una concepci¨®n asc¨¦tica de One-Eye Jack (El rostro impenetrable) que no se aven¨ªa con talante alguno, y decidi¨®- sentarse ¨¦l mismo en el sill¨®n de director y encarar sus propias ideas. Le sali¨® un western como quer¨ªa. Un westem at¨ªpico, rom¨¢ntico, violento, bello, austero, dial¨¦ctico, parsimonioso y solemne como un pavo real. Al tiempo apacigu¨® su hambre vedetista derrochando un recital marlonbrandista de aqu¨ª te espero, con un reparto extraordinario.