Primer ministro contra presidente, duelo ins¨®lito en la V Rep¨²blica

Fran?ois Mitterrand y Jaeques Chirac, presidente de la Rep¨²blica y primer ministro, respectivamente, se enfrentar¨¢n en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, el domingo 8 de mayo. Durante dos semanas, deber¨¢n compaginar sus responsabilidades como m¨¢ximas autoridades del Estado y sus deberes como candidatos, apoyados por las dos grandes formaciones pol¨ªticas francesas: Chirac, por la coalici¨®n entre la neogaullista Asamblea para la Rep¨²blica (RPR) y la confederaci¨®n Uni¨®n para la Democracia Francesa (UDF); Mitterrand, por el Partido Socialista Franc¨¦s (PS). ?sta es una situaci¨®n totalmente ins¨®lita en la historia de Francia, que obliga a ambos candidatos a un mayor cuidado en la explotaci¨®n electoral de las cuestiones pol¨ªticas m¨¢s candentes.Para Jacques Chirac, ¨¦sta es tambi¨¦n la primera ocasi¨®n en que llega a la segunda vuelta de una elecci¨®n presidencial. El primer ministro se present¨® a las elecciones presidenciales de candidatos que pasaron a la segunda vuelta: Val¨¦ry Giscard d'Estaing, con el 27,8% de los sufragios, y Fran?ois Mitterrand, con el 26%.

La llegada de Chirac ala segunda vuelta significa, por s¨ª sola, un hito hist¨®rico en el gaullismo, pues desde 1969 ning¨²n candidato apoyado por el partido que reivindica las ideas del general De Gaulle hab¨ªa conseguido situarse en la gran final que da acceso a la presidencia de la Rep¨²blica. Una de las paradojas de la V Rep¨²blica, fundada por De Gaulle, es que tras De Gaulle y su sucesor, Georges Pompidou, ninguno de sus dirigentes hab¨ªa conseguido no ya la presidencia, sino ni tan s¨®lo estar en la segunda vuelta.

Para Fran?ois Mitterrand, en cambio, ¨¦sta es la tercera vez en que llega a la elecci¨®n decisiva de la segunda vuelta. En 1965 consigui¨®, con el 31,7% de los votos, poner en ballotage al propio general De Gaulle, que lleg¨® a pensar en su retirada al haber obtenido el 44,6%, y no superar el list¨®n del 50%, como esperaban sus partidarios, convencidos de que la elecci¨®n presidencial -la primera que se celebraba por sufragio universal en la V Rep¨²blica- era asimilable a un plebiscito.

En 1974 Mitterrand se situ¨® en cabeza de las elecciones en la primera vuelta, con el 43,2%, y se enfrent¨® en la segunda vuelta con Giscard d'Estaing, que hab¨ªa conseguido el 32,6%. En 1981, finalmente, qued¨® en segundo lugar, con el 26%, frente a Giscard, con el 27,8%. S¨®lo en S una elecci¨®n presidencial, la de 1969, Mitterrand no estuvo presente ni en la primera ni en la segunda vuelta. Para Jacques Chirac, su resultado de ayer representa, pese a la dificultad de llegar a la presidencia de la Rep¨²blica, una cierta consolidaci¨®n de la posici¨®n de su partido, el RPR, en el conjunto de la derecha francesa.

En caso de derrota el 8 de mayo, Chirac, como jefe de la mayor¨ªa conservadora que venci¨® a los socialistas en 1986, se convertir¨ªa en el jefe de la oposici¨®n en la nueva etapa que se abrir¨¢ con la elecci¨®n de Mitterrand. Ser¨¢ el momento para aplicar las ideas explicitadas hace unas semanas por su lugarteniente, el ministro de Econom¨ªa, Edouard Balladur, sobre la necesidad de fusionar la derecha en un gran partido conservador. En caso de una victoria final, Chirac habr¨¢ conseguido coronar el trabajo iniciado en 1986 y proceder¨¢ tambi¨¦n a unificar a la derecha con los instrumentos que le dar¨¢ el poder presidencial y gubernamental. Chirac no prev¨¦, por el momento, disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones generales, aunque puede encontrarse con la ausencia de los votos de algunos barristas resentidos por la derrota de su candidato.

Si Mitterrand vence, en cambio, llevar¨¢ de nuevo a los socialistas al Gobierno, en un Gabinete de apertura hacia el centro. No disolver¨¢ por el momento la Asamblea Nacional para convocar elecciones. Si su Gobierno hallara un exceso de dificultades ante el poder legislativo, Mitterrand convocar¨ªa elecciones para despu¨¦s del verano. Su objetivo es intentar desgajar de la actual UDF una fuerza centrista capaz de aliarse con los socialistas.